El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el 'expresident' Carles Puigdemont han advertido este viernes tras reunirse en Waterloo de que los eventuales indultos a los líderes independentistas presos "no son la solución al conflicto político" catalán. 

En este sentido, Aragonès ha vuelto a reivindicar la amnistía y el derecho a la autodeterminación para resolver el problema. El presidente del Govern ha apuntado que "con indultos no se soluciona la represión" y que muestra de ello es que la reunión entre ambos se ha tenido que hacer en Bélgica, en vez de realizarse con "normalidad" en el Palau de la Generalitat. 

Por su parte, Puigdemont ha afirmado que "el Estado está abocado a hacer indultos porque sabe perfectamente que si no toma la iniciativa otros la tomarán por él" y ha denunciado que no hay "ninguna de las demandas históricas de Cataluña que haya quedado satisfecha". También ha dicho que "más allá del concepto de mesa de diálogo habría que entrar en el concepto de mesa de negociación".

Después de que desde la CUP se afirmara este jueves que en dos años habrá un referéndum en Cataluña, ya sea pactado o unilateral, el 'expresident' ha señalado que "solo un referéndum pactado con el Estado español puede sustituir el del 1 de octubre", y ha añadido: "Debemos mantener nuestra estrategia en el marco de una estrategia conjunta". Aragonès ha dicho que "es evidente que el independentismo nunca va a renunciar a su objetivo, que es la independencia de Cataluña".

Al ser preguntado por el motivo por el cual el presidente del Govern no ha asistido a la conferencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de este viernes en Barcelona, ha respondido que está en Waterloo "para trabajar la relación institucional con Puigdemont". "Con el gesto de hoy queremos hacer un reconocimiento institucional al presidente de una legislatura extremadamente difícil y mostrar voluntad de continuidad institucional", ha dicho.

Aragonès también ha asegurado que no le "consta invitación alguna" a la conferencia que Sánchez ofrecerá el lunes en la capital catalana, pero que lo que pueda expresar el presidente del Gobierno acerca de Cataluña "se debe tratar entre las dos presidencias y los dos gobiernos". En este sentido, ha señalado que está prevista una reunión entre ambos en junio.

Preguntado Puigdemont acerca de si tiene pensado volver a España, ha respondido que "la interpelación se debe dirigir al Estado": "¿Va a respetar la inmunidad de todos los eurodiputados del Parlamento Europeo España como estado miembro?".

Aragonès ha llegado a la residencia de Puigdemont y ha sido recibido por el ahora eurodiputado de JxCat a la entrada. Ambos se han agradecido mutuamente el encuentro y han apuntado que es el inicio de "una nueva relación institucional", tras las tensiones entre ERC y JxCat por la formación del Govern. El 'expresident' ha descrito la conversación como "franca, positiva y personal".

Ha sido el primer encuentro entre Aragonès y Puigdemont  desde la toma de posesión del primero.

La reunión entre ambos coincide con la visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Cataluña para participar en la XXXVI Reunión Anual del Cercle d'Economia, que se celebra en el Hotel W de Barcelona.

Y todo ello cuando planea durante las próximas semanas la posible concesión de los indultos a los presos del 1-O por parte del Gobierno central, así como una futura reunión entre Sánchez y Aragonès este junio que aún no tiene fecha fijada en el calendario y la posible reanudación de la mesa de diálogo.

El PSC reprocha a Aragonès que esté en Waterloo 

La portavoz del PSC en el Parlament, Alícia Romero, ha reprochado este viernes a Aragonès que haya "priorizado" visitar a Puigdemont en Waterloo (Bélgica) a asistir a la conferencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en Barcelona.

"Supongo que son los condicionantes que le pone JxCat en este acuerdo, que nosotros decimos que nace fracasado. Estas son las hipotecas de ERC y de Pere Aragonès por pactar con JxCat", ha afirmado en una rueda de prensa desde el Parlament.

Aun así, Romero ha apuntado que el presiente de la Generalitat "puede hacer lo que crea conveniente con su agenda" pero ha remarcado que esta semana era "importante" tras haber recibido España el aval de Europa para su plan de recuperación con los fondos europeos.

Por otro lado, Romero ha defendido que la Generalitat se presente como acusación particular ante cualquier agresión a un trabajador público, sean Mossos d'Esquadra o personal sanitario.

Lo ha dicho un día después de que ERC y JxCat hayan dado apoyo a una declaración en el Parlament, impulsada por la CUP, en la que se insta al Govern a "retirarse como acusación particular de todas las causas abiertas por el ejercicio del derecho a la libre manifestación", como las que se derivan del "procés".

Se trata de una declaración de apoyo a Marcel Vivet, manifestante independentista condenado a cinco años de cárcel por la Audiencia de Barcelona por participar en un boicot contra el sindicato policial Jusapol en septiembre de 2018.