La decisión prácticamente rotunda de los tribunales de Malawi no ha "achantado" a la reina del pop, que ahora planea continuar con su idea de adoptar, ampliando ligeramente las fronteras, eso sí.

Madonna, que ha sufrido un revés al ver como denegaban su solicitud para adoptar a Mercy, una pequeña de cuatro años de Malawi (de donde es su otro hijo adoptivo, David Banda), se plantea ahora, en caso de que su apelación sea desestimada, conseguir los permisos necesarios en otras regiones africanas, como Nigeria o Lesotho.

La polifacética artista visitó hace unos meses Malawi en busca de otra niño con el que aumentar su familia. Las leyes de adopción de Malawi, bastante estrictas, no han dado carta blanca a la cantante, ya que entre otros requisitos, le piden que resida unos 18 meses en el país africano. Actualmente, Madonna está a la espera de la decisión final del tribunal (formado por tres jueces), que la harán pública presuntamente a finales de este mes.

Según ¡Hola!, la cantante no se muestra muy optimista, y ya considera abiertamente la posibilidad de que rechacen su apelación. Por otro lado, su representante ha declarado que aún no hay que dar nada por cierto, y que aún mantienen la esperanza de llevarse a Mercy a casa.

Por su parte, Madonna ha preferido ser cauta y de momento, sigue buscando otras opciones con las que llegar al sueño de ser madre de nuevo. Lo que sí parece tener claro es que desea un pequeño originario de África, y algunos ya consideran que pronto hará una visita oficial a nuevos países africanos donde las leyes sean más permisivas.