Según una nota de prensa de la Comisaría gijonesa, los policías acudieron a las 22.15 horas a un bar del barrio de Laviada porque unvecino de la zona había amenazado con un cuchillo a la dueña de un bar.

La mujer, que se encontraba "muy nerviosa y asustada", refirió que momentos antes un vecino se había asomado a la ventana y había comenzado a insultar a los clientes porque hacían ruido y no le dejaban oír la tele.

Poco después, esta persona había decidido bajar a la calle armado con un cuchillo para intimidarla porque no había atendido a sus quejas y seguía con normalidad en su trabajo.

Varios testigos confirmaron las amenazas proferidas por el vecino, que también se había enfrentado a ellos cuando salieron en defensa de la encargada del negocio, a la que llegó a aproximar el cuchillo al estómago "en actitud desafiante y retadora".

El autor de las amenazas fue detenido en su vivienda en la que se había refugiado tras conocer que los clientes del bar habían avisado a la Policía. En el momento del arresto, hizo entrega del cuchillo que había esgrimido contra la mujer que tenía 20 centímetros de filo.

El hombre ya había tenido problemas de convivencia en la comunidad y con su propia familia, "por su reiterado comportamiento violento y agresivo", según la Policía.