La presidenta del Parlament de Catalunya, Laura Borràs, ha declinado asistir a la toma de posesión como jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Barcelona del coronel Pedro Antonio Pizarro en Sant Andreu de la Barca (Barcelona).

Así se lo ha manifestado en una carta enviada a la delegada del Gobierno en Catalunya, Teresa Cunillera, donde asegura que como presidenta del Parlament se debe "a las aspiraciones legítimas de la ciudadanía del país que defiende el derecho a decidir su futuro político".

"Las imágenes de la violenta actuación de los agentes del cuerpo de la Guardia Civil durante el 1 de octubre de 2017 no se pueden borrar de nuestra memoria colectiva. Soy conocedora de las prácticas que este cuerpo, actuando como 'policía patriótica', ha llevado a cabo para perseguir a la disidencia política", y ha puesto como ejemplo casos como el de Tamara Carrasco, o los miembros de los CDR detenidos en el marco de la operación 'Judas'.

En la misiva también explica que sí acudirá a la entrega del 53 Premio de Honor de les Lletres Catalanes para seguir apoyando "la lengua y la cultura catalana", y pide a Cunillera que la actuación del cuerpo policial alcance los estándares democráticos que, a su juicio, se espera de una fuerza de seguridad de un Estado miembro de la UE.

También han rechazado asistir a dicha toma de posesión el secretario cuarto de la Mesa del Parlament, Ruben Wagensberg (ERC) y la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras. "Es evidente que no iremos. La Guardia Civil es uno de los principales actores de la represión de ayer, hoy y de siempre. Que se vayan", ha asegurado Wagensberg en un mensaje en su cuenta de Twitter. 

Por su parte, Nogueras ha anunciado que no acudirá mientras el cuerpo no pida disculpas por las "brutales actuaciones" del 1-O.