¿Dónde está el vuelo AF 447? Equipos de salvamento de Brasil, Estados Unidos, Francia y España peinan una inmensa masa de agua, en pleno Océano Atlántico entre Sudamérica y África, en busca del vuelo de Air France que desapareció ayer lunes cuando cubría el trayecto entre Río de Janeiro y París.

Pocas pistas tienen los aviones y barcos de rescate en esta búsqueda a ciegas del aparato que llevaba 228 personas a bordo, entre los que hay dos españoles. La última es el avistamiento por parte de un piloto brasileño de la aerolínea TAM de unos "extraños puntos naranjas" que podrían ser fuselaje, cerca de las costas de Senegal. Por su parte, la fuerza aérea brasileña dijo que un carguero que estaba en la zona no encontró señales de restos quemados de la nave de Air France.

Sin embargo desde las costas del país africano hasta el último punto donde se recibió la última comunicación del aparato hay unos 2.000 kilómetros en línea recta.

El AF 447 dejó la zona controlada por el radar brasileño a las 2.48 horas por lo que el aparato debería ir dando reportes cada cuarto de hora. Sin embargo, su última comunicación fue un aviso automático de fallo en un circuito electrico realizado a las 4.14. Seis minutos después los intentos de contactar con el aparato por parte del Control Aéreo resultan infructuosos.

Tampoco hay muchos datos claros sobre qué le pudo ocurrir al vuelo de Air France. El aparato atravesaba una zona de convergencia intertropical en la que coinciden los vientos de los dos hemisferios lo que provocan nubes y conforman un zona de fuertes tormentas y turbulencias.

Desde la compañía se intentó explicar que un rayo podría haber alcanzado el aparato y haber provocado el fallo eléctrico y el, parece que probable, accidente. Un fallo eléctrico provocaría que el piloto tuviera que controlar manualmente el avión y orientarse sin ayuda. Algo, que en condiciones climatológicas adversas sería complicado.

Sin embargo, expertos consultados por 20minutos.es aseguraban que estos aparatos están diseñados para soportar el impacto de un rayo y que se navega con radar para localizar y evitar, en la manera de lo posible las tormentas más fuertes.

Sin esperanzas

El presidente francés, Nicolás Sarkozy declaró que las esperanzas de hallar supervivientes son "muy débiles".

Las autoridades francesas no descartan ninguna opción de momento aunque parecen inclinarse por el accidente aéreo.

Otras opciones están casi descartadas.

La del atentado no podría ser comprobada hasta no encontrar los restos del avión o hasta que no fuera reivindicado. A pesar de que el periódico francés Le Figaro no descartaba la posibilidad del acto terrorista.  Por su parte, el ministro de Defensa galo Hervé Morin, aseguró que no hay "ningún elemento" que pueda apuntar hacia esa hipótesis.

La posibilidad de un amerizaje en el agua, aunque el público tenga en mente el espectacular aterrizaje acuático que realizó un piloto sobre el río Hudson en Nueva York, es prácticamente imposible sobre el océano encrespado por una tormenta.