El documento de actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de COVID-19 en España establece unos criterios comunes para la interpretación de los indicadores básicos en el Sistema Nacional de Salud con el fin de realizar una evaluación del riesgo en cada territorio. Se trata de una serie de indicadores que, combinados, determinan el grado de alerta. El jueves pasado Asturias estaba en un grado de menos riesgo, el nivel 1.

El documento acordado en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud establece cuatro niveles de alerta, de menor a mayor riesgo: nivel 1, nivel 2, nivel 3 y nivel 4. Esos niveles se aplican a los territorios en función de una serie de indicadores.

Según la última actualización los datos de Asturias son de 71,6 casos por cada 100.000 habitantes de incidencia a 14 días; de 38,8 casos por cada 100.000 habitantes de incidencia a 7 días; de 25,2 casos por cada 100.000 habitantes de incidencia a 14 días en mayores de 65 años; de 15,4 casos por cada 100.000 habitantes de incidencia a 7 días en mayores de 65 años; de un 3,3% de positividad en las pruebas diagnósticas de infección activa; de 68,5% de casos con trazabilidad; del 2,1% de ocupación de camas de agudos por COVID-19; y del 10,5% de ocupación de camas de UCI por COVID-19.

Además de Asturias, están en el nivel 2 de alerta las comunidades de Madrid, Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, y Cataluña.

En el nivel 1 se sitúan Navarra, Canarias, Cantabria, Ceuta y Melilla, Comunidad Valenciana, Galicia, Islas Baleares y Murcia. Las comunidades que están en el nivel 3 son Euskadi y La Rioja. Ninguna comunidad está en el nivel 4 de alerta.