La concejal de Personas, Comunidad y Agenda 2030, Mariama Sall, ha explicado que la instalación tiene capacidad para 122 personas y ofrece servicios de almuerzo y cena, duchas, lavandería, conectividad y consigna, en la presentación a los medios de comunicación de la campaña de alojamiento que comienza este martes.

Sall ha agregado que cada persona podrá pasar siete noches, con la posibilidad de una prórroga de otras tres, y que este año el ayuntamiento ha intentado mejorar el confort de las personas temporeras: "Hemos hecho el cambio de las típicas hamacas de emergencia a una cama, mucho más cómoda, también hemos ampliado servicios, como el servicio de higiene, con lavadoras a renting, son los propios temporeros los que pueden lavarse de forma autónoma la ropa".

La concejal ha dicho también que se ha mejorado la gastronomía: "El año pasado era mayoritariamente mediterránea y este año hemos intentado adaptarlo al gusto de las personas que acogemos que son mayoritariamente magrebíes y de la comunidad senegalesa".

El Ayuntamiento ha incorporado a una especialista en temas de migración, a un asesor en temas laborales y en derechos legales, el servicio de interpretación y el de mediación comunitaria.

Por su parte, el concejal de la Horta, David Melé, ha explicado que el Ayuntamiento está trabajando con el sector agrario en un censo para conocer la necesidad de mano de obra de los payeses y payesas de Lleida.

Además del pabellón 3 de Fira de Lleida, el Ayuntamiento de Lleida ofrecerá este año un centenar de habitaciones en 18 viviendas amuebladas a trabajadores de la campaña de la fruta a los que cobrará cuatro euros por noche.