El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha asegurado que desea enviar de crucero por el Mediterráneo a los niños damnificados por el terremoto de los Abruzos, durante una visita a la capital de la región, L'Aquila.

Berlusconi ha apuntado que antes de que termine septiembre no habrá más refugiados en los campos de tiendas de campaña y que el Gobierno desea "programar vacaciones en el mar para las familias y cruceros en el Mediterráneo para los niños".

No es la primera vez que Berlusconi habla de vacaciones en esta azotada región. El pasado 8 de abril, a pocos días del seísmo, recomendó a los damnificados que se tomaran la situación como "un fin de semana de cámping".

El primer ministro italiano apuntó que está esperanzado en que antes de que llegue el invierno todos los afectados por el terremoto, que causó la muerte a casi 300 personas y dejó a decenas de miles de ellas sin hogar, tengan una casa.

Reconstrucción a cargo del Estado

En cuanto a la reconstrucción de los edificios de los centros históricos de las poblaciones afectadas por el seísmo, Berlusconi prometió que será sufragada "al cien por cien por el Estado".

Berlusconi también se refirió al ritmo de los trabajos para acondicionar L'Aquila para la cumbre de líderes del G8 que se celebrará en esta ciudad entre el 8 y el 10 de julio.

El líder italiano aseguró que todos los dirigentes del G8 dormirán en unos apartamentos que están siendo renovados.