Los afectados por las obras van a pedir cuentas al Concello

  • Comerciantes y vecinos no se oponen a las reformas, pero sí a que se hagan todas a la vez.
  • Hay tiendas que cierran y traslados.
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Con más de 100 puntos de la ciudad en obras, tanto caminar como circular en coche es complicado. Pero también para muchos resulta complicado ganarse el pan de cada día cuando las vallas dificultan el acceso a los negocios de las zonas en fase de reforma.

En esta situación se encuentran los comerciantes de las calles Zaragoza, Barcelona y Zamora. Aseguran que han registrado varios casos de tiendas que cierran, otras que están a punto de cerrar y también se producen traslados a consecuencia de las humanizaciones. En sólo dos meses seis comercios de estas zonas han cesado su actividad o cambiado de ubicación.

Según su representante, José Rodríguez, no se trata de «un comerciante cabreado» sino de muchos que ven «lesionados sus derechos».

Las pérdidas llegan en algunos casos al 70% en una zona en la que se ubican unos 220 establecimientos.

Por ello, los afectados por las obras van a remitir al Concello reclamaciones pidiendo responsabilidades patrimoniales, con indemnizaciones por los «daños causados» y «bonificaciones» en las tasas municipales. En concreto piden pagar menos por el IBI, por la bajada de los precios de la vivienda; por la recogida de basura, por el impuesto de circulación y los vados, pues con las obras estos servicios se han visto afectados negativamente.

Tanto los comerciantes como los vecinos coinciden en señalar que no se oponen a las obras de mejora, pero sí a su forma de ejecución. «Deberían realizarse en tramos más pequeños» de forma que no ocasionen tantos problemas de accesibilidad», señalan.

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