Norma Duval ha sufrido el golpe más duro que podría recibir. Su madre, Purificación Aguilera, falleció este domingo, a los 90 años, tras once años luchando contra el Alzheimer. Se ha tratado de una muerte natural que ha dejado devastada a la vedette, siempre muy unida a su madre.

Tras velar su cuerpo en la casa que Norma posee en La Moraleja, donde la artista compartió los últimos años de vida junto a su madre, en la mañana de este martes la familia se ha dirigido al cementerio de San Isidro, donde ha tenido lugar el último adiós a Purificación.

Tal como ha informado la revista Semana, la vedette ha estado acompañada en todo momento por sus familiares y amigos, que han acudido al camposanto a despedir a la madre de Duval. Debido a las restricciones a causa de la pandemia, ha sido solo el círculo más cercano quienes han podido acudir al lugar. 

Con el rostro marcado por el dolor y portando un ramo de flores que ha depositado junto al ataúd de su madre, la que fuera actriz y vedette ha acudido acompañada por su pareja, el empresario Matthias Kuhn, y algunos de sus hijos. En la mente de todos estaba Carla, hermana de Norma, que falleció en 2010, víctima de un cáncer de cuello de útero, a los 46 años y cuyos restos mortales descansan en el mismo cementerio donde, ahora, también descansa Purificación Aguilera.