Para ello, la Consejería de Sanidad y el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos suscribirán próximamente un convenio en el que se establecerán los términos de esta colaboración y la forma en la que se llevará a cabo este estudio de seguridad y seroprevalencia de la inmunización frente a la enfermedad de la COVID.

El estudio se llevará a cabo a través de la Red Centinela de Farmacias de Castilla y León, que incluye 170 oficinas distribuidas estratégicamente por la Comunidad y que tienen como objetivo vigilar la seguridad de los medicamentos y el desarrollo de proyectos de investigación que contribuyen a mejorar la seguridad de los pacientes.

Precisamente las oficinas de farmacia se consideran un canal adecuado para realizar este trabajo dada la proximidad y la accesibilidad a los pacientes.

Asimismo, se tiene en cuenta como cuestiones que avalan su idoneidad su integración en el sistema sanitario, la confianza del paciente en el farmacéutico y la formación de éste último, así como por la utilidad de las farmacias en las zonas rurales que carecen de centro de salud.

SEGURIDAD E INMUNIZACIÓN

Así, la Consejería de Sanidad, en el marco de la actual pandemia, considera necesario suscribir este convenio para realizar este seguimiento sobre la seguridad de las vacunas con las que se está inmunizando a la población, han informado a Europa Press fuentes sanitarias.

En concreto, surge la necesidad de llevar a cabo actuaciones de fomento de la Salud Pública y la prevención de la COVID, entre las que tienen una importancia especial las actuaciones que permitan conocer el porcentaje de población que haya superado la infección fon el fin de conseguir el grado de inmunidad necesario para vencer a la enfermedad, dada la actual situación de la pandemia.

De esta forma, según el convenio, las farmacias integradas en la Red Centinela llevarán a cabo este estudio de seguridad y de anticuerpos después de la inmunización, para lo que podrán realizar test, que serán suministrados por la Consejería de Sanidad, inicialmente en una cantidad aproximada de 4.500 unidades.

Para ello, se establecerán las diferentes características de la población sobre la que se llevará a cabo el estudio y la forma en la que se realizará la captación de pacientes para comprobar el citado grado de inmunidad así como la duración de la misma, una cuestión que aún no está aclarada y que se puede adquirir tras haber padecido la enfermedad o mediante la administración de vacunas.

Las oficinas de farmacia se encargarán de la difusión del estudio y realizarán los test para posteriormente tratar la información que arroje una visión sobre la situación en lo que se refiere a inmunización de la población de Castilla y León.