Por primera vez desde que empezó la pandemia, la UE recibirá este verano turistas procedentes de países terceros. Los embajadores de los Estados miembros han acordado este miércoles los términos en los que se permitirán los viajes "no esenciales" desde fuera del territorio europeo, con unas condiciones que, por ejemplo, abren la puerta a la llegada a España del codiciado turismo británico y también del de Estados Unidos, que también es una de las principales procedencias de los turistas que llegan.

Según este acuerdo, los ciudadanos procedentes de países con una incidencia acumulada (IA) del virus inferior a 75 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días no necesitarán ni una PCR negativa ni estar vacunados para entrar en territorio europeo, siempre que también cumplan requisitos relativos a la confiabilidad de los diagnósticos. Deberán acreditar que hacen al menos 300 tests por cada 100.000 habitantes y que la tasa de positividad que estos arrojan no supera el 4%.

El establecimiento de estos criterios supone un cambio sustancial con respecto a la política que ha seguido la UE con respecto a los turistas internacionales desde que empezó la pandemia. Hasta ahora, sus fronteras estaban cerradas a viajes que no fueran considerados "esenciales" y solo se permitía la llegada sin PCR ni vacunas de personas procedentes de una reducida lista de países con una IA inferior a 25 casos por cada 100.000 habitantes. Formaban parte de ella Australia, Nueva Zelanda, Ruanda, Singapur, Corea del Sur, Tailandia y China y, más recientemente, Israel.

Ahora esta lista se amplía para permitir la llegada sin PCR ni vacuna de países con una IA de hasta 75 -y que cumplan los criterios de diagnóstico y positividad- pero también cambia la filosofía de base, porque a partir de ahora la UE abre sus puertas a viajes "no esenciales", es decir, al turismo.

Con estos criterios, dos de los países que podrán emitir turistas a la UE sin necesidad de PCR ni de vacuna serán el Reino Unido -con una IA que ronda los 40- y Japón, que según el último informe del Ministerio de Sanidad tiene una IA de 63,7 casos por cada 100.000 habitantes. 

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En todo caso, la libertad con la que los turistas británicos podrán entrar en España contrasta todavía con la cuarentena de 10 días que deberán observar a su regreso, debido a que el Reino Unido ha situado a España en su lista "ámbar" de países a los que no se puede viajar sin tener que permanecer después en aislamiento. El Gobierno español confía en entrar en la lista "verde" , de viajes permitidos, antes de que empiece el verano.

Turistas vacunados

Además y de acuerdo con la propuesta que han respaldado este miércoles los embajadores y refrendarán los ministros este jueves, se establece otra categoría para permitir la libre llegada de turistas, que tengan la pauta completa de la vacuna. Los viajeros deberán demostrar que se han vacunado 14 días antes de entrar a territorio comunitario

Este criterio abre también la puerta a países como Estados Unidos, otro importante países emisor de turistas a España. Según datos de Sanidad, su incidencia es de 165,7, con lo que supera con mucho el umbral e  75, pero allí la vacunación discurre a un ritmo más rápido que en Europa y muchos de sus ciudadanos ya están totalmente inmunizados.

El acuerdo de los embajadores debe ser refrendado este jueves en la reunión que celebrarán los ministros europeos de Comercio -Reyes Maroto por parte de España-. Así se convertirá en legislación comunitaria que posteriormente deberá ser incorporada a la legislación española. Según indican fuentes del Gobierno, no tardará en ocurrir, para que pueda entrar en vigor una norma que consideran "una noticia muy, muy buena" para el sector turístico y para la economía española en general. 

"Nos va a permitir cumplir lo que veníamos diciendo, que el verano marcaría el inicio de la recuperación de la economía", remarcan en la Secretaría de Estado de Turismo.