Hasta 5.000 personas en varios locales de Barcelona: la nueva prueba piloto que está sobre la mesa de Salud

  • El ensayo está pendiente de ser aprobado y ya ha recibido más de 500 peticiones para participar.
  • Consta de un test previo, un app para gestionar los resultados y la trazabilidad y aparatos para desinfectar el aire.
Interior d'una discoteca
Interior de una discoteca.
Joaquin Corchero - Europa Press
Interior d'una discoteca

La Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm) quiere llevar a cabo una prueba piloto el 21 de mayo en Barcelona en la que participen entre 4.000 y 5.000 personas y entre 8 y 13 locales de ocio nocturno y restauración.

"Esta acción demostrará que el sector se encuentra preparado para reabrir y gestionar grandes multitudes de personas de forma ordenada y con total seguridad", ha asegurado el secretario general de la organización, Joaquim Boadas.

La patronal se reunió el lunes con el Ayuntamiento de Barcelona, la Guardia Urbana y la Agencia de Salud Pública de Barcelona. En un comunicado, afirman que la prueba piloto ya está pendiente de la autorización de la Conselleria de Salud y que el consistorio se ha comprometido a tratar el tema con el Departamento, que tendrá la última palabra.

Más de 500 peticiones para participar

Fecasarm señala que, pese a que la prueba sólo se ha anunciado, ya son más de 500 personas las que han pedido participar en ella. "La gente saldrá igualmente y, por tanto, es mejor que lo haga en espacios legales y seguros", considera el presidente de la federación, David López.

Este ensayo contaría con un "triple sistema de seguridad" que consiste en test previos, una app que gestiona los resultados y que permite la trazabilidad de las personas respetando protección de datos, y unos aparatos de desinfección de aire y superficies en espacios cerrados que, considera Fecasarm, "contrarrestan los argumentos de la Agencia de Salud Pública de Cataluña en base a los que en su día se decidió cerrar el ocio nocturno y restringir la restauración nocturna".

Para López, la opción de salir con estas medidas de seguridad comporta otro beneficio: "Si se condiciona el acceso a salir de fiesta en un test previo, cada semana conseguiremos realizar un cribado masivo entre población joven no vacunada que de otro modo nunca se haría un test, lo que permitirá detectar casos asintomáticos en una fase precoz de la cadena de contagio. Y ello a coste cero para la Administración, suponiendo un beneficio añadido para la salud pública global".

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