Mari Carmen Alcañiz, la esposa del hombre que falleció el pasado sábado en Valencia después de que su primo político presuntamente le atacara con una catana en su vivienda, en la calle Mayor del barrio valenciano de Nazaret, ha pedido que el agresor "no salga de la cárcel nunca", al tiempo que dijo sentirse "fatal" y no entender lo sucedido.

La mujer ha relatado cómo vio a su esposo desangrarse, al tiempo que gritaba "Me han pinchado". "No le han pinchando, le han matado", gritó en ese momento la mujer, poco antes de la muerte de su marido.

Todo comenzó cuando ella y su marido estaban en la cocina de su casa, "oyendo música y tomando unas cervezas", cuando de repente subieron la tía y el primo de ella, que viven en el piso de abajo, para protestar por el volumen."Pero la música no estaba muy fuerte, sino a volumen normal", ha recordado la mujer.

"No le daba la gana"

Sin embargo, a su marido "no le daba la gana" bajar el volumen y entre los dos hombres comenzó una discusión que prosiguió en la escalera. Ella acepta que zarandeó un poco al vecino e incluso lo amenazó, "pero solo de palabra".

El agresor entonces bajó a su piso y volvió con la catana, con la que hirió a su víctima. Él se giró y dijo: "me han pinchado, me han pinchado", dio unos pasos y "cayó muerto". "Vi cómo se desangraba".

En presencia de una hija

Su hija mayor, de 15 años, presenció lo sucedido; no así los otros tres hijos de la pareja, de 7, 8 y 10 años, porque "estaban durmiendo"

La esposa llamó en ese momento a la Policía y a los servicios de emergencia, pero no le contestaban. Finalmente, llegó a su casa el Samur, cuando ya nada se podía hacer por su esposo.

El agresor, de 40 años de edad, fue detenido por la Policía, que lo pasará este martes a disposición judicial, según fuentes del Cuerpo Nacional de Policía.