Así, Endesa destinará a actuaciones para mejorar el suministro en Canarias más de la mitad de la inversión en redes, que asciende a un total de 135 millones de euros, según ha informado la empresa eléctrica en nota de prensa.

Así, el programa de ejecución de nuevas infraestructuras eléctricas en la actividad de distribución previsto para este periodo se materializará en un plan equilibrado de actuaciones y planes de mejora en ambas provincias y en todas las islas.

En concreto, el plan estratégico de la compañía para los próximos tres años "reconoce el papel protagonista" de las redes y centra sus esfuerzos en mejorar la digitalización, fiabilidad, resiliencia, flexibilidad y eficiencia de la extensa red de distribución de Endesa en Canarias, que cuenta con 26.027 kilómetros de media y baja tensión, 46 subestaciones AT/MT (alta/media tensión) y 8.739 centros de transformación.

En este sentido, el esfuerzo inversor refleja la "importancia" que Endesa concede a las redes de distribución, ya que consideran es la "pieza clave" para facilitar la transición hacia un modelo energético descarbonizado caracterizado por una creciente electrificación de la demanda, el avance de las energías renovables y un porcentaje cada vez mayor de recursos distribuidos conectados directamente a la red de distribución.

Al respecto, el director general de Infraestructuras y Redes de Endesa, José Manuel Revuelta, ha explicado que las redes tradicionales de distribución pasivas que transportaban la electricidad hasta el hogar "se van a transformar en redes activas y participativas, posicionando al cliente en el centro del sistema eléctrico y mejorando la calidad del suministro que recibe".

Añadió que Endesa trabaja para "hacer realidad esa transformación". Finalmente, indicó que a nivel nacional el "esfuerzo en mejora" de la calidad absorberá el 46 por ciento de la inversión de e-distribución en el trienio, siendo esta una de las prioridades del negocio de distribución al que Endesa destinará 2.600 millones de euros entre 2021 y 2023.

Así, ha apuntado que esta cifra supone un incremento del 30 por ciento respecto al plan anterior, un aumento que se traducirá en la creación de unos 7.500 puestos de trabajo asociados a la inversión a lo largo de los tres años de vigencia de este plan -a razón de unos 2.500 empleos al año-.

Por último, afirman que el esfuerzo inversor "será continuo y creciente" desde este año y hasta 2023 para facilitar la electrificación y transición energética de España. La digitalización se extiende por toda la infraestructura de la red de distribución y permite aprovechar el potencial del big data y la inteligencia artificial para mejorar la operativa en un proceso de toma de decisiones cada vez más basado en los datos.