Para Mundina, aunque con las medidas se ha "aminorado" el paso de autobuses por la calle Sant Pau, los vecinos "siguen sufriendo molestias". Por ello, ha exigido que se realicen mediciones en este punto, ha indicado el PP en un comunicado.

En este sentido, ha remarcado que el Síndic de Greuges "instó al alcalde de la ciudad, Joan Ribó, a tomar medidas correctoras" y ha censurado que "la única actuación ha sido desplazar una parada de autobús unos metros y suprimir el paso de sólo tres líneas, mientras los vecinos siguen rodeados en la calle Sant Pau y Xàtiva por autobuses de la EMT".

Mundina ha señalado que el PP presentó una moción en el mes de octubre y ha criticado que "ha tenido que pasar casi medio año para que el concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, reconociera la situación denunciada por los vecinos y rectificara".

"Ha tomado medidas, pero nos parecen insuficientes pues se siguen generando molestias y contaminación. Siguen pasando y parando cientos de autobuses todos los días", ha afirmado el edil 'popular', que ha instado al gobierno municipal a "cumplir las recomendaciones del Síndic" y que las inmediaciones de la Finca de Hierro "dejen de ser una auténtica estación de punto y parada para los autobuses de la EMT".

Mundina ha insistido en que el aumento de autobuses junto a la zona "se reconoció hasta por el propio Ayuntamiento" y ha precisado que una queja de un residente admitida por el Síndic debido a las molestias del ruido y la contaminación acústica de autobuses "llevó a la EMT y a la Concejalía de Movilidad presentar como respuesta varios informes".

El Síndic, apunta el 'popular', "instó a controlar la contaminación acústica y ambiental y recomendó al consistorio adoptar todas las medidas necesarias para reducir al máximo posible la contaminación acústica y atmosférica existente con la finalidad de proteger el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio y los derechos constitucionales a la protección de la salud".