La periodista Carme Chaparro ha sorprendido este sábado a sus seguidores de Instagram al revelar que en el pasado fue víctima de acoso y amenazas de muerte a través de cartas anónimas. 

"Hoy, tirando cosas viejas, he encontrado esto. El primer capítulo de lo que se convirtió en amenazas de muerte", ha escrito Chaparro en un post que acompaña una imagen de la primera carta en la que el autor anónimo insulta a la comunicadora con calificativos como "vieja pelleja", "inútil" o "falsa y tramposa".

La periodista ha aprovechado para dirigirse públicamente al autor de este mensaje: "El hombre que lo escribió, hace casi 20 años, me estará leyendo. Sé que fuiste tú. Y sigues siendo un mierda".

Según ha contado Chaparro, la carta que muestra en la red social "llegó a casa por correo postal, con mi nombre intencionadamente mal escrito". En un primer momento, prosigue, "no le di más importancia. De hecho, pensé que lo había tirado. Un, o una, imbécil más".

Sin embargo, la cosa no terminó ahí. "Luego llegaron más anónimos. Con faltas de ortografía demasiado evidentes como para ser reales. Alguien intentando parecer inculto", ha valorado Chaparro.

Estos mensajes anónimos, "cada vez más amenazantes", se convirtieron dos o tres meses después en "amenazas de muerte. Muy concretas. Con muchos datos personales".

En aquel momento, la periodista no contó a nadie lo que le ocurría. "Pensé que no se podía hacer nada. Pero vomitaba del miedo que tenía", ha reconocido.

El descubrimiento del autor de tal acoso llegó por casualidad: "Un día me fijé en los matasellos. El tipo mandaba las amenazas desde distintas ciudades de España. ¿Quién viajaba tanto?", se preguntó entonces.

Lo supo un tiempo después, "comiendo un día con una amiga a quien se lo conté. Día tal en Bilbao. Día cual en Valencia. Día pascual en Cádiz. Y resulta que los lugares y las fechas coincidían con la gira promocional de alguien que trabajaba cerca de mí".

Para Chaparro, "saberlo me hizo sentir poderosa, porque ese tipo es un mierda que necesita amenazar y asustar para creer que es alguien y que tiene el control".

La también escritora ha reconocido que nunca le llegó a decir nada al supuesto acosador, pero se arrepiente de no haberlo hecho, "y no solo eso, sino denunciarlo en la Policía. Exponer al monstruo", ha calificado.

"Él no sabe que yo lo sé. Y alguna vez que nos hemos encontrado, porque afortunadamente está muy lejos de mi vida ya, viene a saludarme como un perrito faldero", ha añadido Chaparro.

Tras haber dado a conocer este desconocido episodio de su vida, la periodista ha hecho un llamamiento a denunciar amenazas como la suya: "Denunciad, buscad apoyo, exponed a los que os hacen daño. Las amenazas no se toleran, nunca. Porque ese ser quizá se lo esté haciendo ahora a otra mujer. Y esa mujer esté asustada. Y yo podría haberlo evitado", ha concluido.