Los trabajadores del sector del metal de la provincia de Pontevedra han sembrado hoy el caos en Vigo. Desde primera hora, a su paso, cortaron el tráfico y colapsaron las principales arterias de la ciudad.

De distintas factorías de Vincios, Porriño, Mos y Ponteareas partieron los piquetes. La praza de España fue el punto de encuentro. Desde allí, miles de trabajadores recorrieron la Gran Vía hasta la praza de América, donde se reunieron con otros manifestantes de su sector.

El tráfico fue el que más ha sufrido las consecuencias de estas protestas. El túnel de praza de España tuvo que ser cerrado y un autobús de Vitrasa que pasaba por la zona se quedó allí bloqueado por lo que el conductor dejó bajar a los pasajeros.

Entre los que iban al volante la paciencia se acababa. Una mujer intentó romper con su coche el cordón que formaban los trabajadores, sin éxito. Incluso alguno de ellos portaba una motosierra para hacer ruido.

En todo momento, los manifestantes fueron flanqueados por varias furgonetas de la Policía Nacional, para evitar incidentes graves.

Mañana tendrá lugar la segunda jornada de protestas con las que reclaman la negociación del convenio colectivo del metal en Pontevedra. El martes, la patronal dio plantón a los sindicatos al no presentarse a la reunión que tenían prevista.

El paro afecta a unos 27.000 trabajadores de 2.500 empresas.

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