Viajar por el litoral de las mil caras

• Costa de Ópalo / Bahía de Somme / Costa Florida:

Al norte, se levantan los blancos acantilados de la Costa de Ópalo: el más alto mide 130 metros. Alrededor, las playas de arena o de guijarros son un magnífico telón de fondo para paseos y siestas.

Y ya en tierras de Picardía, está el remanso de paz de los pájaros que es la Bahía de Somme, catalogada entre las más hermosas del mundo, entre dunas salvajes y marismas. Más al sur, se encuentran las playas normandas, muy frecuentadas por los turistas y bautizadas como la Costa Florida.

• Las costas bretonas:

La Bretaña, región bordeada por el mar y el océano, ofrece una gran diversidad de paisajes: de los afilados peñones de la Costa Esmeralda al norte, a las célebres ráfagas de viento de los acantilados de la Costa Salvaje al sur, pasando por la Costa de Granito Rosa y sus grandes rocas de color, el litoral bretón encanta a los visitantes, ya que es la costa misteriosa de las leyendas, de las tierras celtas.

• Costa de Amor / Costas de Vendée:

Un pedazo del litoral que enamora, situado cerca de la Baule, una hermosa bahía. Estas costas del oeste de Francia destacan también por sus umbrías marismas, como la célebre marisma de Poitevin o el característico parque natural regional de la Brière.

• Costa de Aquitania / Costa vasca:

En la costa de Aquitania convergen 4 tipos de litoral: el Médoc y sus grandes playas, la cuenca de Arcachon y su famosa Duna de Pilat, las Landas y sus pinos, y por último la costa vasca.

Con una longitud de 35 km, se extiende hasta la frontera española y es conocida por sus lugares ventosos, ideales para la práctica del surf. Un viento que también ha labrado su paisaje rocoso, con altos acantilados que cobijan pequeñas calas, playas y penínsulas.

• Costa Azul / Camarga:

Primer destino turístico de Francia, la Riviera es famosa por la belleza de su litoral: playas, montañas, acantilados, calas, caletas, peñones... La Camarga seduce con sus marismas, sus arrozales y sus praderas donde abundan los caballos, los toros y los flamencos rosas.

• Costas de Córcega:

Auténtica montaña en el mar, Córcega es una tierra de contrastes. De los acantilados del extremo sur dominado por Bonifacio, a los paisajes escarpados del Cabo Córcega al norte, podrá relajarse tranquilamente en los 300 km de arena fina, pero también pasearse por los macizos rocosos como las calanches de Piana, cuyos colores cambian a medida que avanza el día.

Lecturas:

•Guide vert des plus belles îles du littoral français

Guía verde Michelin, edición 2006, sobre las islas más hermosas del litoral francés

•Littoral Atlantique

Colección Chemins de la Nature

•Alpes Maritimes Littoral

Franck Mercier Editions

•Tour du littoral corse

Albiana Editions