Militares, policías, profesores o bomberos que todavía no hayan recibido ninguna dosis de vacuna -de AstraZeneca, según la pauta inicial- se inmunizarán con Pfizer, Moderna o Janssen cuando les llegue el turno de su pinchazo, que llegará una vez que se haya terminado de vacunar a los mayores de 60 años, un plazo que la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha fijado para finales de mayo.

Sanidad renuncia a espaciar las dosis de Pfizer y Moderna más allá de 21 y 28 días tras proponer ampliarlo al doble

Gobierno y comunidades han acordado este martes una nueva actualización de la estrategia de vacunación para adaptarla a la decisión que se tomó hace unas semanas de no administrar la vacuna de AstraZeneca a los menores de 60 años.

Entre quienes no llegan a esas edad, los primeros en ser llamados a recibir el pinchazo son los colectivos en activo que desempeñan funciones "esenciales" para la sociedad, que en principio iban a recibir la vacuna de la Universidad de Oxford pero que ya no será así.

Según lo acordado este martes, "se les pondrá la vacuna disponible tras vacunar a las personas de más de 60 años, en lugar de vacunarse con AstraZeneca como hasta ahora". Esto reduce las posibilidades a tres de las cuatro vacunas autorizadas por el momento en la UE y España: Pfizer, Moderna y Janssen. Esta última ha recibido luz verde de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) este martes, y se empezará a inocular en personas de entre 70 y 79 años, como también ha confirmado la Comisión de Salud Pública en su reunión.

La estrategia de vacunación reconoce como trabajadores esenciales a los militares y los efectivos  de la Guardia Civil, Policía Nacional, Autonómica y Local, Bomberos, técnicos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, profesionales de Protección civil, Emergencias.

También a los docentes y personal de educación infantil, especial, de primaria y secundaria, así como otros profesionales que atienden directamente al alumnado de centros autorizados, de titularidad pública y privada.

El limbo de la primera dosis de AstraZeneca

Sin embargo, la medida acordada este martes no afecta a todos, porque gran parte de los tres millones de personas que en España tienen una dosis puesta de AstraZeneca son profesionales esenciales, que empezaron a vacunarse con ella en febrero. 

Para estos profesionales esenciales el Gobierno todavía no ha encontrado una solución, dado que no les podrán la segunda de este mismo suero. Las opciones son dejarles solo con la que tienen o ponerles una segunda dosis de otra marca. En concreto de Pfizer, de acuerdo con el ensayo clínico que está desarrollando el Instituto de Salud Carlos III para confirmar su hipótesis de que sería posible combinarlas y que se espera que esté listo a principios de mayo.

"La vacuna a administrar en las personas con menos de 60 años de edad vacunadas con una primera dosis [de AstraZeneca] y pendientes de recibir la segunda se decidirá próximamente, en función de la evidencia científica de las diferentes vacunas", ha informado Sanidad tras la reunión de los directores generales del Ministerio y de las comunidades, que también ha decidido no modificar el periodo entre la primera y la segunda dosis de Pfizer y Moderna, que seguirá siendo de 21 y 28 días respectivamente.