Los hechos comenzaron hace unos días, sobre las tres y media de la madrugada, cuando los agentes acudieron a una finca donde, al parecer, un hombre impedía el descanso nocturno a los vecinos con la música a un elevado volumen, amenazándolos a gritos y propinando fuertes golpes, según han informado las fuerzas de seguridad en un comunicado.

De madrugada, cuando los policías acudieron al inmueble, escucharon el sonido desde la calle, por lo que le advirtieron al sospechoso que bajase el volumen. Aunque hizo lo señalado en ese momento, volvió a subirlo cuando se marchó la patrulla.

Además, el hombre, molesto con los vecinos por alertar a la policía, presuntamente comenzó a lanzarles objetos a sus balcones, mientras les amenazaba con quemarles la casa y cortarles el cuello.

Los agentes acudieron hasta en dos ocasiones al inmueble, pero la última vez los policías averiguaron que el sospechoso había esgrimido un arma blanca y puesto en el cuello a un vecino mientras le amenazaba de muerte. Asimismo, los agentes comprobaron que el hombre produjo numerosos desperfectos en varias puertas al golpearlas fuertemente con un objeto punzante.

Cuando cesaron las amenazas, el presunto autor se dirigió al rellano, donde fue sorprendido por la patrulla con el cuchillo. No obstante, el hombre emprendió la huida y se refugió en su domicilio. Fue detenido posteriormente.

Los investigadores conocieron que esta persona causaba molestias a los vecinos del edificio e impedía el descanso nocturno con música a elevado volumen, insultos y lanzamientos de objetos. A raíz de estos hechos, algunos perjudicados tuvieron que alojarse en domicilios de otros familiares.

Finalmente, el hombre, que cuenta con numerosos antecedentes policiales, algunos por delitos violentos, fue detenido como presunto autor de un delito de amenazas, daños y desobediencia grave. El arrestado ha pasado a disposición judicial.