Carod llama 'freakies', fachas y marginales a los agresores de ERC en la Diada

Carod rehusó ahondar en los incidentes de ayer en el Fossar y se limitó a señalar que fue "un espectáculo penoso que no se puede volver a repetir".

El presidente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, calificó hoy de "'freakies', fachas y marginales" a las personas que agredieron a los representantes de ERC cuando intentaban acceder al Fossar de les Moreres durante los actos de la Diada Nacional de Catalunya y aplaudió que el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, haya anunciado una investigación.

Carod se manifestó satisfecho por la investigación ordenada por Maragall y vio "adecuado" que la Generalitat "actúe de oficio", descartando así una denuncia por parte de ERC.

El líder de ERC lamentó que la formación republicana haya sido "víctima de comportamientos incívicos", aunque dejó claro que los silbidos recibidos a primera hora de la mañana en la ofrenda floral en el monumento de Rafael Casanova no eran motivo de queja.

Las ideas no se pueden defender nunca a golpe de porra ni de pistola

Para Carod, "nadie tiene derecho a agredir a nadie" y condenó enérgicamente las agresiones recordando el lema de campaña de ERC, "hablando se entiende la gente". "Las ideas no se pueden defender nunca a golpe de porra ni de pistola", destacó.

Por otra parte, ERC evaluó positivamente "en su conjunto" el acto institucional celebrado en la Ciutadella, aunque se planteó la necesidad de "mejorar" algunos elementos "simbólicos, protocolarios, emblemáticos y políticos".

Según Carod, hay elementos "susceptibles de mejorar" y confió en que "con un año por delante" en la Diada de 2006 el acto institucional tenga "una dimensión donde se puedan sentir cómodas todas las instituciones".

Aunque resaltó la importancia de que la organización recaiga "en todos sus puntos y detalles" en el Gobierno y el Parlament, también quiso apuntar como necesaria la "dignificación del papel de las administraciones locales" y en especial el papel del ayuntamiento que cada año aporta su 'senyera'.

En el campo simbólico y protocolario, Carod comentó que incluso "algún uniformado" recomendó que la bandera catalana se izara al inicio del acto y no al final del acto, ya que ésta debería presidir la celebración.

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