En el acto, en el que ha participado el alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, así como diferentes representantes de la corporación municipal; la diputada provincial de Bienestar Social, Ángeles Martínez; y miembros de otras asociaciones como Asperger Almería y Astea Autismo, el primer edil ha agradecido "la labor de esas personas que ayudan a los demás y dedican su tiempo a que nadie se quede atrás".

"Todas esas personas contribuyen a hacer de Almería una ciudad más inclusiva, accesible y mejor", ha asegurado al tiempo que ha pedido un aplauso de reconocimiento para todas ellas.

Asimismo, ha señalado que, aunque "se ha avanzado mucho en materia de concienciación, aún son muchos los retos que tenemos por delante".

"Tenemos que seguir reclamando una educación de calidad y adecuada a las capacidades y necesidades específicas de las personas con autismo y también su acceso al mundo laboral en criterios de igualdad", ha apuntado.

Por su parte, la diputada de Bienestar Social, Ángeles Martínez, ha agradecido a las asociaciones que trabajan por dar voz y visibilidad a las personas con autismo como Altea.

"Todos tenemos capacidades diferentes, pero tenemos grandes fortalezas. Desde la Diputación de Almería trabajamos desde todos los ámbitos: cultural, deportivo y servicios sociales para dar visibilidad, ayudar a las familias de niños con autismo e igualar las oportunidades entre todos los almerienses", ha trasladado.

La presidenta de Altea, Mari Carmen Almagro, ha agradecido el "compromiso profesional y personal con el colectivo" tanto del Ayuntamiento como de la Diputación y ha aprovechado la conmemoración del Día del Autismo para lanzar un mensaje de esperanza y reivindicar los derechos del colectivo.

Lo ha hecho a través de la lectura de un Manifiesto, elaborado por Autismo España y la Federación Andaluza del Autismo, a cargo de tres usuarios de Altea: Isa Capel, Emilio Moya y Mario Sola.

En materia de educación, reivindican que se garantice "una red variada, suficiente y especializada de servicios de apoyo, recursos y centros educativos en todos los territorios" o la promoción de la Formación Profesional.

En empleo, ponen de manifiesto la necesidad de "una regulación laboral que tenga en cuenta a las personas con autismo y favorezca un empleo estable con salario digno para poder desarrollar una vida independiente".

Por todo ello, el colectivo de personas con autismo exigen "reformas urgentes" como la modificación de la normativa en materia de empleo de manera que se les considere como colectivo de alta vulnerabilidad o facilitar su acceso a programas de empleo, entre otros.