Por segundo año consecutivo, la pandemia y las restricciones sanitarias han obligado a suspender uno de los actos más multitudinarios de la Semana Santa palmesana, que espera con "incertidumbre" la llegada de devotos en los próximos días.

Según han explicado a Europa Press desde la iglesia de la Anunciación, el templo permanecerá abierto para que los fieles puedan venerar la imagen tanto de 08.00 a 13.00 horas y de 17.00 a 20.00 horas y el sábado, de 17.00 a 20.00 horas.

El horario es el habitual del templo pero ante la esperada afluencia a partir de este miércoles, cuando se tendría que haber celebrado el 'Davallament' la apertura se prolongará "mientras haya personas que deseen acceder" y venerar la talla del siglo XVI.

Respecto al aforo, según han apuntado, las actuales restricciones lo fijan en aproximadamente 120 personas por lo que en la entrada se controlará el acceso en función de la entrada y salida de personas. Eso sí, han apuntado, en ningún caso se impedirá que las personas puedan estar en el templo o ante la imagen "el tiempo que deseen o sientan que necesiten".

Desde la iglesia han indicado que afrontan los próximos días con cierta "incertidumbre" ante la posible afluencia porque, aunque por un lado, la devoción al Cristo de la Sangre está ampliamente extendida, también es cierto que hay muchas personas, mayores especialmente, que aún pueden temer las aglomeraciones.

En todo caso, han resaltado que la posibilidad de poder mantener las visitas de los fieles, aunque no haya 'Davallament' ya supone un avance respecto a la insólita situación del pasado año, con las puertas del templo cerradas.