Las familias murcianas con una persona con discapacidad intelectual a su cargo soportan mucho peor la crisis que otra que no lo tiene. Deben asumir un sobreesfuerzo económico medio de 18.104 1 anuales. 1.500 1 más al mes que tienen que salir de sus bolsillos a pesar de las ayudas como las de la Ley de Dependencia. Lo revela un estudio encargado a la empresa Antares Consulting.

Pero el sobreesfuerzo puede alcanzar hasta los 28.624 euros anuales de media si se incluyen los costes de oportunidad de lo que deja de ingresar la familia por atender la discapacidad.

"Tienen que adaptar los aseos de casa, pagar material ortopédico, tienen más gasto farmacéutico, atención médica, desplazamientos...", explicaron ayer desde el Movimiento Asociativo de Familias de Personas con Discapacidad Intelectual Feaps.

En concreto, en la Región hay 7.800 familias con un miembro discapacitado a su cargo. De ellas, 2.421 no reciben ayudas directas por tener a un discapacitado de tipo leve (aquellos que viven con sus familias y pueden trabajar).

Según el estudio, el sobreesfuerzo económico de las familias con algún discapacitado intelectual asciende a casi 226 millones euros al año, equivalente al 0,8% del PIB regional de 2008.

En relación con la media nacional, que se gasta entre 19.229 y 31.868 1 al año si tienen un discapacitado a su cargo, las familias murcianas tienen una mejor situación al afrontar los gastos. En el resto del país desembolsan en términos absolutos entre 1.126 y 3.244 1 más que aquí.

Paqui Teruel. Ama de casa, 43 años

"Necesito la ayuda de mis padres"

Hace 12 años su vida cambio. Nació su hijo Pablo con una esclerosis tuberosa de bourneville. Una enfermedad degenerativa que le obligó a dejar su trabajo de educadora infantil. Divorciada, cuenta con una pensión de su exmarido de 1.200 euros y 500 de ayuda por la dependencia.

"No llego a fin de mes. Necesito la ayuda de mis padres para material ortopédico, adaptar el baño...", cuenta.