Según ha informado el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA), la Comisión Interinstitucional para la llegada de la alta velocidad a Bilbao se ha reunido este miércoles en Madrid, con objeto de hacer un seguimiento de los avances en las actuaciones necesarias para hacer efectiva la llegada de la alta velocidad a la estación de Bilbao-Abando.

La Comisión ha contado con la asistencia, por parte del MITMA, del secretario general de Infraestructuras, Sergio Vázquez Torrón, y de la presidenta de ADIF, Isabel Pardo de Vera; por parte del Gobierno del País Vasco, del consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Ignacio Mª Arriola; y, por parte del Ayuntamiento de Bilbao, del concejal de Obras, Servicios, Rehabilitación Urbana y Espacio Público, Asier Abaunza. Asimismo, han asistido diversos representantes de las tres administraciones.

En primer lugar, los técnicos del MITMA han explicado los progresos en la tramitación del Estudio informativo, que actualmente se encuentra en fase de evaluación ambiental, describiéndose los diversos avances realizados en los estudios específicos requeridos para dicha evaluación.

En este marco, se ha considerado necesario que se mantengan contactos a nivel técnico para que el Ayuntamiento de Bilbao pueda también avanzar en los aspectos urbanísticos de la operación, dada la influencia que algunos elementos de la solución ferroviaria tienen sobre el diseño de la ciudad.

GRUPO DE TRABAJO

Para ello, se ha acordado la creación de un grupo de trabajo con las tres administraciones para trabajar sobre dichos aspectos. En los próximos días, se concretará la composición del citado grupo que está previsto que se reúna ya en el mes de abril.

Asimismo, se ha considerado conveniente progresar en la articulación de los mecanismos de gestión y financiación de las actuaciones compatibles con la llegada de la alta velocidad, para lo cual se van a estudiar los posibles escenarios en este sentido. En este contexto, se trabajará en las distintas opciones que pueden incluir y que tendrán en cuenta los plazos de ejecución.

Este último análisis deberá servir de base a la celebración de una próxima reunión de la Comisión, que se acuerda celebrar en un plazo de tres meses.