El Gobierno de Níger elevó a 137 la cifra de muertos en la masacre cometida el domingo en la región de Tahoua (fronteriza con Mali), y además informó de un gran número de heridos, según el balance emitido este lunes por la noche.

Se desconoce por el momento quiénes son los autores de esta matanza, perpetrada simultáneamente en tres poblados del centro de Níger: Intazayane, Bakorate y Akifakif, donde los atacantes llegados en motos dispararon a quemarropa contra sus habitantes.

Un contingente militar logró llegar a uno de los tres lugares atacados y ahí se enzarzaron en un tiroteo con los atacantes que trataban de replegarse hacia Mali, según dijo a Efe una fuente policial, que desconoce si hubo víctimas militares.

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Aunque no hay reivindicación hasta el momento, todos los observadores coinciden en que la matanza tiene el "sello" de otros ataques perpetrados por los yihadistas, activos en esta zona gracias a que tienen muy cerca sus refugios en el Mali vecino.

La pasada semana, 58 campesinos que regresaban de un mercado local de Banibangou, departamento de Ouallam, en la región occidental de Tillabéry, fueron fríamente asesinados en otro ataque similar, después de interceptar en un camino los tres vehículos en los que regresaban los campesinos.

El Gobierno ha decretado un luto oficial de tres días quwe comenzará este martes.

La matanza del domingo se produjo en el mismo día en que el Tribunal Constitucional de Níger proclamó la victoria de Mohamed Bazoum en las elecciones presidenciales del pasado 21 de febrero con el 55,66% de votos, que quedó por delante de su rival Mahamane Ousmane.