El estado de la mar impidió que los dos buzos pudiesen regresar por sus medios a tierra, donde les esperaban los familiares que al ver la situación llamaron al 112. Ambos consiguieron alcanzar unas rocas del acantilado, según ha explicado el SEPA en nota de prensa.

Uno de los bomberos-rescatadores accedió a la zona donde se encontraban y les colocó el triangulo de rescate para poder subirlos a la aeronave. Los afectados fueron trasladados a las inmediaciones, donde les esperaban unos familiares.

El Centro de Coordinación de Emergencias del 112-Asturias recibió el aviso a las 18.03 horas. En la llamada indicaban que había dos personas enriscadas en un acantilado. El mar estaba picado y no podían salir del lugar. Finalizado el rescate, el equipo regresó a base a las 18.59 horas.