Este proyecto, uno de los "ejes fundamentales" de la Administración gallega en materia sanitaria, lo ha anunciado este lunes el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, en un acto en la Agencia de Conocimiento en Salud (ACIS) al que también han acudido el gerente del Servizo Galego de Saúde (Sergas), José Flores, y el director xeral de Asistencia Sanitaria, Jorge Aboal.

Desde allí, García Comesaña ha remarcado que esta terapia consiguió "la remisión total" del cáncer entre un 50 y un 80 por ciento en pacientes con un pronóstico de supervivencia que no superaba los seis meses y para los que no existía alternativa.

La puesta en marcha del centro 'CAR-T' en Galicia responde, según ha asegurado Comesaña, a un "compromiso" de la Xunta con la sanidad y a un mandato del Parlamento de Galicia del pasado noviembre, con la aprobación de una proposición no de ley registrada por el PPdeG.

No en vano, García Comesaña ha agradecido la labor no solo del equipo de la Dirección Xeral de Asistencia Sanitaria, sino también a los servicios de Hematología y Hemoterapia del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), ya que los primeros pasos de este proyecto se dan "tan solo cuatro meses después" del acuerdo parlamentario.

TRES MILLONES DE EUROS DE LA XUNTA

Este centro 'CAR-T' cuenta con tres millones de euros en los presupuestos de la Xunta para 2021 y pasará a ser una "referencia" en la producción de estos medicamentos. No obstante, el conselleiro ha afirmado que Galicia "no solo desarrollará las líneas de investigación de otros centros nacionales", sino que también "podrá crear sus propios fármacos" a partir de las investigaciones que se lleven a cabo en la propia Comunidad.

La terapia 'CAR-T' supondrá, en palabras de García Comesaña, un "punto de inflexión" y un "hito" en la oncología. Con ella, los mismos linfocitos 'T' del paciente, modificados genéticamente, son los que se convierten en fármaco para atacar y acabar con las células cancerígenas de modo selectivo.

La primera de las alianzas en este campo será con el Hospital Clínic de Barcelona, pionero en este tipo de terapias. Este centro catalán identificó y desarrolló una línea de investigación 'CAR-T' que a principios de febrero se convirtió en la primera desarrollada íntegramente en Europa en ser aprobada por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS). Ahora, Galicia continuará esta labor convirtiéndolo en medicamento en el proyecto que se pondrá en marcha este mismo año.