Jesús Manuel Durán, como muchas otras familias de Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra, compró hace ya algunos años una parcela en la zona de las Siete Revueltas, más conocida por La Ruana. Allí se construyó hace cinco años una vivienda que ahora el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra va a derribar. Si el juez no dictamina lo contrario, Jesús Manuel, sus mujer y sus dos hijos pequeños se quedarán sin hogar.

Cuando compró la parcela formalizó sus escrituras en Dos Hermanas. Pero el Consistorio de Alcalá dice que la casa está en un terreno, calificado como suelo rústico, que pertenece a su municipio. Y por tanto, le ha impuesto a Jesús Manuel, un albañil con invalidez absoluta que cobra algo más de 400 euros al mes, una multa de 30.000 euros por construcción ilegal y 20.000 por los trabajos de demolición.

Dice no entender cómo el Ayuntamiento alcalareño asegura que la finca está en su municipio cuando las notas simples pedidas por Jesús Manuel recogen que «no existen bienes o derechos reales de clase alguna a nombre» ni de él ni de su mujer, Mónica Ramos Cruzado.

El Consistorio de Alcalá dice que « seguirá actuando conforme a la ley con las construcciones ilegales», pero sin hacer referencia al caso de Jesús Manuel

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