La medida tiene una duración máxima de seis meses, con posibilidad de que se prorrogue otros tres hasta la celebración del juicio. La causa está abierta por un supuesto delito de agresión sexual, informan fuentes judiciales a Europa Press.

La Fiscalía ha pedido, durante la vista celebrada esta mañana a la que han asistido los menores, el internamiento en régimen cerrado, mientras las defensas pidieron la libertad vigilada.

El juez acordó el internamiento en régimen semiabierto atendiendo a la gravedad de los hechos investigados.

Los hechos se produjeron la noche del pasado sábado, si bien la denuncia de los mismos se produjo el domingo y concluyó con la detención de los tres menores que, al parecer, conocían a la supuesta víctima con la que participaron en un botellón.

La menor, que no descartó que le echaran algo en la bebida, presentó distintas lesiones.