Pablo Iglesias y Podemos han protestado en las últimas jornadas en contra de la detención del rapero Pablo Hasel el pasado lunes. En la sesión de control al Gobierno del pasado miércoles, el vicepresidente segundo de Gobierno respondió al PP que no le parecía "normal" que "Cristina Cifuentes se vaya de rositas" en el juicio del caso Máster "y [el rapero] Pablo Hasel esté en la cárcel".

Sin embargo, la opinión del líder de la formación morada sobre el rapero no siempre fue así de favorable. En una entrevista en 2014, Iglesias incluso pedía que "ni se acercara" a él, y consideraba que los "problemas" del rapero no eran "políticos, son de psiquiátrico".

En la entrevista, hecha en el canal de Youtube Furor TV en mayo de 2014, Iglesias responde a una pregunta que Hasel le hace: "¿Si te pudieras cargar a Juan Carlos de Borbón, a Amancio Ortega o a Aznar, a quién te cargarías de los tres?" (minuto 16) 

"Dios mío, a ninguno, no quiero matar a nadie", responde Iglesias. "Además, desprecio profundamente a los que convierten la política en una cuestión de odio personal y convierten su excitación narcicista en algo que tenga que ver con la política".

"Me gustaría que hubiera leyes para poder juzgar a gente como esta"

Iglesias continúa reflexionando que "la vida humana es una cosa lo suficientemente seria como para no formular preguntas de este tipo de a quién matarías". 

Después Iglesias pronuncia una frase: "A mí me gustaría que hubiera leyes para poder juzgar a gente como esta, un proceso justo, con todas las garantías". A través de sus redes sociales, Podemos ha desmentido que esta frase se refiriera a Pablo Hasel. 

El propio entrevistador, Sergio Gregori, ha aclarado en su cuenta de Twitter que Iglesias se refería a juzgar a Aznar o Juan Carlos I, no a Pablo Hasel.

Distancia con Hasel

Como apunta el propio entrevistador, lo que sí hace Iglesias es distanciarse del discurso de Hasel y condenar su frivolidad a la hora de hablar de matar a personajes públicos.

En la entrevista de 2014, el líder de Podemos finaliza diciendo que lo peor que puede sucederle a alguien de izquierdas es convertirse en la caricatura que difunden sus enemigos. 

"Con esta gente ni que se acerque a mi", concluye Iglesias, "Que se ocupen de otra cosa, no queremos tener nada que ver con gente cuyos problemas no son políticos, son de psiquiátrico".