El documental, Framing Britney Spears, estrenado el pasado 3 de febrero en la plataforma estadounidense de contenido en streaming Hulu, ha alimentado los rumores y movimientos que habían surgido en torno a la cantante desde hacía unos meses. 

Esta película, no disponible de momento en España, hace un repaso por la vida de Spears y habla de #FreeBritney, un movimiento de denuncia surgido en las redes sociales para liberar a la intérprete de la tutela legal a la que está sometida por su padre, Jamie Spears. 

Ahora, sin embargo, Claude Kelly, un productor que trabajó con ella para su disco Circus, ha hecho una entrevista para The Sunday Times en la que ha declarado que, incluso en esos momentos, Britney era toda una profesional. 

Es necesario recordar que este álbum vio la luz en 2008, en uno de los peores momentos personales para Spears, en el que se vio sometida a una gran presión mediática y llegó a raparse la cabeza totalmente, eliminando su pelo como una de sus mayores señas de identidad. 

Desde 2007 vive bajo la tutela legal de su padre y, por ello, #FreeBritney ha causado un gran revuelo en las redes sociales desde que se conociese este dato. Este control ejercido por su padre hace que no pueda tomar prácticamente ninguna decisión relevante acerca de su vida o su carrera profesional. 

En Instagram Britney Spears levantó una horda de rumores a finales de año por sus extraños vídeos bailando y sus fotos en las que se mostraba con una expresión seria o inquietante.

Las declaraciones de Kelly parecen dar más credibilidad aún al movimiento creador alrededor de la princesa del pop. Aunque, The New York Times, productor del documental, afirma que trataron de ponerse en contacto con Britney Spears para que participase, pero ni siquiera están seguros de si recibió sus mensajes.