Merkel alerta de lo que puede ocurrir con el coronavirus hasta finales de marzo: "Las variantes desplazan al original"

La canciller alemana, Angela Merkel, lleva mascarilla durante una sesión del Bundestag alemán, en Berlín.
La canciller alemana, Angela Merkel, lleva mascarilla durante una sesión del Bundestag alemán, en Berlín.
EFE
La canciller alemana, Angela Merkel, lleva mascarilla durante una sesión del Bundestag alemán, en Berlín.

La canciller alemana, Angela Merkel, ha defendido esta semana la prolongación de las restricciones en ese país hasta el 7 de marzo ante el temor de las nuevas mutaciones del coronavirus, "notablemente más agresivas", y ha marcado la pauta para una reapertura gradual de la vida pública a partir de una incidencia estabilizada en 35 casos semanales por 100.000 habitantes, indicador que ahora se sitúa en los 62,2 casos.

Durante su declaración ante el Bundestag alemán para explicar la extensión de las restricciones, Merkel lanzó una advertencia sobre las nuevas variantes, de las que ha dicho que "tarde o temprano se impondrán y desplazarán al virus original", como ya ha ocurrido en otros países europeos, con consecuencias "dramáticas".

"Se están extendiendo con especial rapidez y requieren importantes esfuerzos adicionales", ha alertado Merkel.

En este sentido, la canciller alemana subrayó la necesidad de que los ciudadanos sigan siendo "muy, muy cautelosos" en las próximas semanas. "Sigue sin haber una medida más suave que la de minimizar los contactos de manera consecuente para llevar la evolución de contagios de manera sostenible a un nivel controlable", manifestó Merkel.

Este viernes, la canciller alemana indicaba en una entrevista con la televisión pública ZDF que "hay que esperar a que haya un ciclo de infecciones estabilizado para plantearnos sucesivas fases de reapertura".

Ese nivel o incidencia semanal debe haber quedado por debajo de los 35 positivos en una determinada región durante dos semanas para poder ser considerado estable y proceder a un alivio territorial de las limitaciones, ha concretado Merkel.

La canciller ha insistido en que lo prioritario debe ser la reapertura de la actividad escolar normalizada, ya que desde diciembre están interrumpidas las clases presenciales regulares. De este modo, las escuelas podrán volver gradualmente a las clases presenciales antes del 7 de marzo. Aunque esta cuestión es competencia de cada 'Land', hay consenso en que la reapertura se inicie a partir del 22 de febrero, de acuerdo a los criterios y niveles de incidencia de cada región.

Asimismo, se plantea la reapertura de las peluquerías a partir del 1 de marzo, como primer paso hacia esa relajación de las restricciones si la evolución de la pandemia lo permite.

Un proceso "gradual"

Según la canciller, hay "buenas perspectivas" para que el 1 de marzo la incidencia acumulada en siete días haya bajado de los actuales 62,2 nuevos casos por cada 100.000 hasta los 50, nivel que se considera necesario para poder volver a rastrear todas las cadenas de contagio.

Para la reapertura de comercios no esenciales, museos y servicios que requieren un contacto físico prolongado, el nuevo criterio marco consensuado con los poderes regionales se sitúa en una incidencia no superior a 35, una perspectiva que Merkel calificó de "correcta e importante".

"Será un proceso gradual, aunque todavía no se puede decir cuál será la incidencia con la que podamos hacer según qué cosas" sin correr el riesgo de volver a caer en un crecimiento exponencial de nuevos contagios y de "una tercera gran ola" si se imponen las nuevas variantes del virus, más infecciosas, precisó la canciller.

Merkel se mostró convencida, asimismo, de que "abrir para volver a cerrar" no aporta más previsibilidad a los ciudadanos que esperar unos días para poder garantizar que se pueden relajar medidas en un proceso continuado.

Reuniones decisivas

Las decisiones adoptadas esta semana por Merkel y los líderes regionales alemanes suponen una nueva prórroga a unas restricciones que empezaron el 2 de noviembre con el cierre de la restauración, el ocio y cultura. Les siguieron, en diciembre, los de los comercios no esenciales y de la actividad escolar presencial.

El parón de la vida pública se planteó entonces hasta principios de enero; pero los sucesivos picos de contagios con que se entró en 2021 derivaron en sucesivas prórrogas.

La siguiente reunión de Merkel con los poderes regionales —a los que corresponde implementar las medidas, según su criterio y nivel de incidencia— será 3 de marzo. Ahí se evaluará la evolución de la pandemia y podría decidirse otra fase de relajación de las medidas.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento