"La recuperación de la economía española es una tarea de tal envergadura que ningún Gobierno, ningún partido, puede llevarla a cabo en solitario, sino que exige el esfuerzo, el sacrificio y la implicación de todos", advirtió González durante su intervención en la Junta Ordinaria de Accionistas de la entidad.
González destacó, además, que si la recesión es "dura y prolongada" pueden emerger problemas de solvencia en algunas entidades financieras españolas, que deben resolverse para lograr la recuperación económica. España tiene las instituciones y los procedimientos adecuados para afrontar y resolver estos problemas: las normas de regulación e intervención del Banco de España, el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) y la vuelta al sector privado de la entidad una vez que esté ya saneada.
Reordenación de la banca
La crisis, insistió, implicará una reordenación "drástica" del mapa bancario global y una "profunda transformación" de la industria financiera, en la que sólo estarán ya las entidades más fuertes. Así, propuso que "a nivel global" los recursos tanto públicos como privados se destinen a "identificar y aislar a las entidades débiles" para luego "sanearlas y devolverlas al sector privado" en cuanto sea posible.
La crisis financiera ha supuesto un auténtico "tsunami" para la industria financiera global, que ha sufrido enormes pérdidas, que han hecho que 21 de los 27 mayores grupos bancarios de Europa y Estados Unidos hayan recibido en 2007 "más de 440.000 millones de euros" entre ampliaciones de capital e inyecciones de capital público, dijo González.
Segundo banco mundial
En el panorama financiero internacional "sólo dos bancos no han necesitado nuevo capital" y uno de ellos es el BBVA, dijo González, que añadió que tampoco han acudido a ninguna de las medidas de apoyo al sistema financiero español puestas en marcha por el Gobierno, porque tienen la capacidad de obtener liquidez en los mercados y prefieren "dejar esos fondos a otras entidades" que los necesiten.
Y en este contexto, presumió González, el BBVA obtuvo en 2008 unos resultados "diferenciales" que le convertirán en el segundo banco por beneficios del mundo, pese a su menor tamaño, un gran avance puesto que en 2007 ocupaban la undécima posición. Aunque lamentó que el mercado no está reconociendo debidamente "nuestra mayor solvencia y mejores resultados", se mostró convencido de que a medida que mejore la "visibilidad sobre el futuro", el BBVA registrará una recuperación muy significativa.
La crisis no hará que el banco modifique su estrategia o se aparte de sus principios, al tiempo que extremará la prudencia con un esfuerzo especial en el control de los costes, que tendrán "crecimiento cero" en 2009, ejercicio en el que se congelarán los sueldos de la alta dirección del banco, entre otras iniciativas.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios