En una nota de prensa, el Consistorio zaragozano ha explicado que el "notable" crecimiento del número de usuarios se enmarca en el esfuerzo realizado por el Área de Acción Social y Familia del Ayuntamiento para reforzar las políticas de atención a los ancianos.

El mantenimiento de las personas mayores en su propio domicilio es el principal objetivo de este recurso municipal, que sirve además como elemento de detección de situaciones de riesgo o necesidad.

SERVICIO EN LA PANDEMIA

En las primeras semanas de la pandemia, el Servicio de Ayuda a Domicilio registró un importante número de bajas, por el temor de muchos usuarios al contacto social con las trabajadoras. Sin embargo, en la segunda mitad de 2020, muchas personas han recuperado la confianza, al conocer las rigurosas medidas de prevención sanitaria frente a la COVID-19.

Al mismo tiempo, los centros municipales de servicios sociales han incentivado esta prestación como una herramienta de utilidad para ayudar a personas mayores cuyo riesgo de aislamiento social se ha agravado por la pandemia.

El Servicio de Ayuda a Domicilio supone un apoyo para las personas de avanzada edad en la realización de labores domésticas cotidianas, como la limpieza del hogar, la cocina o la compra de alimentos. En este último caso, muchos usuarios valoran la reducción de riesgos que supone para ellos, como población vulnerable, evitar el desplazamiento a los comercios.

En la mayoría de casos, el servicio se presta uno o dos días a la semana, habitualmente con dos horas por jornada, si bien la prestación se adapta a cada perfil según la valoración de los servicios sociales municipales.

INCREMENTO DEL SAD PREVENTIVO

En el análisis pormenorizado de los datos, se ha apreciado una evolución dispar de los dos tipos del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD): el dirigido a personas dependientes y el preventivo, para usuarios con mayor grado de autonomía personal.

Han crecido en un 24 por ciento los usuarios del SAD preventivo, que abarca a la gran mayoría de usuarios y está financiado a partes iguales entre Ayuntamiento y Gobierno de Aragón. El objetivo es ayudar al mantenimiento de personas con mayor grado de autonomía. En el último año, los usuarios se han incrementado de 5.570 a 6.943.

En cambio, el SAD de dependencia, cuya cobertura está financiada mayoritariamente por el Gobierno de Aragón a través de una encomienda de gestión, ha registrado en el último año un descenso del once por ciento, al pasar de 1.540 usuarios a 1.364.

En parte, este descenso está vinculado al fallecimiento de algunos de los usuarios o al empeoramiento de su estado de salud, que ha provocado su traslado a una residencia o a convivir con sus familiares más cercanos.

REGULARIZACIÓN DEL CONTRATO

El Servicio de Ayuda a Domicilio ha comenzado a funcionar este mes de enero con las tres nuevas adjudicatarias: Arquisocial, Sanivida y People Plus Innovation.

Se ha culminado así el complejo proceso de regularización de este contrato, que estaba caducado desde 2016, con un valor estimado de 87 millones de euros, contando los dos años iniciales y las dos posibles prórrogas anuales, así como las posibles modificaciones.

De esta forma, el Ayuntamiento de Zaragoza garantiza la continuidad del servicio, con seguridad jurídica, y lleva a cabo una notable mejora de las condiciones laborales de las 900 trabajadoras del SAD: un 20 por ciento de subida salarial y una reducción de jornada de 45 horas al año.

Este contrato es el más voluminoso del Área de Acción Social y Familia, y uno de los de mayor envergadura de todo el Ayuntamiento, con unos 20 millones de euros de presupuesto anual.