El presidente de la Diputación, Francisco Reyes, junto a miembros de la Corporación local, ha participado en este acto, que se enmarca en la conmemoración el próximo 27 de enero del Día Internacional de Recuerdo a las Víctimas del Nazismo, y ha recordado a algunos de los orcereños que fallecieron en campos de concentración nazis.

Entre ellos estaban Antonio Berjaga o Bernardo Blázquez, personas que "hay que recordar, visibilizar y reconocer", según ha subrayado Reyes. Ha valorado, además, la oportunidad de realizar este tipo de iniciativas, que "recuerda un pasado que no podemos repetir" y también aquello que hay que proteger: "la libertad, el respeto por los derechos humanos y la democracia".

"Este monumento es un gesto que recuerda el horror nazi, que es pariente directo del horror que se vivió en nuestro país con el franquismo, porque el horror siempre es horror, sea en el lugar que sea", ha manifestado.

Ha añadido que este gesto "se suma al trabajo que se está realizando en la provincia en pos de la Memoria Histórica". Un ámbito en el que "Jaén es hoy por hoy un referente, especialmente en lo que tiene que ver con el conocimiento y con la recuperación de documentos que permitan reconstruir el pasado, con sus nombres y apellidos".

En este campo trabaja especialmente el Instituto de Estudios Giennenses, con la catalogación y digitalización de expedientes de jiennenses encausados después de la Guerra Civil existentes en el Archivo Intermedio Militar Sur de Sevilla, documentación puesta a disposición del público en la biblioteca digital de este organismo autónomo de la Diputación, donde se pueden consultar más de 10.500 expedientes.

"El objetivo de todas estas iniciativas no es otro que evitar que estos nombres se pierdan, que estas historias sean sepultadas por el olvido o la ignorancia", un olvido que "nos puede dejar indefensos ante la repetición de errores y horrores que ya hemos vivido", ha concluido.