El Govern se ha defendido este martes de las críticas lanzadas por los principales rostros sanitarios que combaten la pandemia en Cataluña, quienes censuran que no se hayan endurecido las restricciones por la Covid pese al avance del virus, con más de 3.000 nuevos contagios en las últimas 24 horas, y la proximidad de la Nochevieja.

Ayer lunes, 28 de diciembre, era el día fijado para analizar si las restricciones en vigor desde el pasado día 21 funcionaban como se esperaba y si, en función de eso, se mantenían hasta el 11 de enero o se endurecían.

El Procicat, liderado por los departamentos de Salud e Interior, decidió no tocar las medidas actuales.

Nombres que ya hace meses que forman parte del debate mediático, como los de Magda Campins, jefa de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Vall d'Hebron; Antoni Trilla, epidemiólogo y jefe de Medicina Preventiva del Hospital Clínic; Jaume Padrós, presidente del Colegio de Médicos de Barcelona; Oriol Mitjà, infectólogo del Hospital Can Ruti de Badalona, o Àlex Arenas, profesor de física computacional de la Universidad Rovira i Virgili, han coincidido en lamentar la decisión del ejecutivo catalán.

Todos ellos creen que las actuales medidas no son suficientes para contener a un virus de la Covid-19 que este martes ha sumado 3.010 nuevos contagios y 58 muertes en las últimas 24 horas, mientras el número de pacientes en los hospitales ha aumentado por cuarto día consecutivo con 40 nuevos ingresos.

Por contra, la velocidad de propagación del virus ha bajado siete centésimas con respecto a ayer y se ha situado en 1,09, frente al 1,16 del lunes: ello indica, al encontrarse este valor por encima del 1, que el virus sigue en fase expansiva, pues cada contagiado infecta de media a más de una persona.

El grupo de investigación BIOCOM-SC, de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), señala en este sentido que "esta evolución no es sostenible", mientras el expresident Quim Torra ha escrito en su cuenta de Twitter: "Con la actual presión asistencial son necesarias medidas de restricción social. Ahora no nos la podemos jugar. Especialmente en fin de año".

La portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha dicho en la habitual rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consell Executiu que las medidas ya en vigor son "muy drásticas", más que las tomadas por cualquier otra comunidad autónoma.

Ha afirmado asimismo que el Govern "escucha y respeta todas las críticas", si bien ha añadido que corresponde al ejecutivo "tomar decisiones", maduradas siempre "escuchando a los asesores del departamento de Salud" y acordadas en el marco del Procicat.

Este martes han llegado a Cataluña las aproximadamente 60.000 dosis de la vacuna de Pfizer/BioNtech, que estaba previsto que llegaran ayer pero cuyo envío se ha retrasado un día por problemas logísticos.

Tras el pistoletazo de salida del domingo, cuando Josefa Pérez, de 89 años, fue la primera persona en ser vacunada contra el virus en Cataluña, a partir de mañana se desplegará del todo el proceso de vacunación.

Un portavoz del departamento de Salud ha explicado que la previsión es vacunar cinco días a la semana -recepción de las dosis el lunes, vacunación de martes a sábado-, proceso que esta semana se intentará comprimir en cuatro días debido al citado retraso en la entrega.

Para la vacunación, que comienza por residentes de geriátricos y profesionales que les cuidan, se han formado 25 equipos, con 20 enfermeras y seis auxiliares administrativos cada uno.

Las vacunas que lleguen cada semana se repartirán entre los 25 equipos y además habrá una reserva extra guardada en los ultracongeladores del Banco de Sangre y Tejidos.