Estuvo "hasta las cinco" de la madrugada celebrándolo con su Oscar. Y sólo unas horas después se sentó frente a Oprah Winfrey en The Oprah Winfrey Show para contarle cómo había sido ganar la preciada estatuilla por su papel en Vicky Cristina Barcelona.

Penélope Cruz explicó a la presentadora que fue muy hermoso verse sobre el escenario del Teatro Kodak junto a actrices como Tilda Swinton y Goldie Hawn. "Mi corazón latía cada vez más rápido", confesó, añadiendo que de verdad pensó que iba a "desmayarse" cuando abrieron el sobre.

La actriz contó que los días previos a la ceremonia estuvo muy sobrecargada de trabajo y viajes entre Europa y EE UU y que dedicó el premio a todos aquellos que se quedaron por la noche en España a ver la gala. Entre ellos su familia, sus mayores fans. Muchos de ellos hasta "se pintaron una P en la frente".

Cruz dijo en la entrevista que aún le costará unos días asimilar lo ocurrido, y que justo después de recibir el Oscar le dio una especie de ataque; estuvo llorando "durante 20 minutos". El golpe de realidad le sobrevino al día siguiente, cuando al despertarse vio el Oscar sobre su almohada: ¡Mire y estaba allí!".