Hacienda defiende que Baleares debe ser una de las principales regiones receptoras del fondo REACT-EU

La Conselleria de Hacienda y Relaciones Exteriores ha aplaudido la aprobación esta semana del fondo europeo REACT-EU, y ha defendido que Baleares debe ser una de las principales regiones receptoras, teniendo en cuenta que el reglamento de aplicación plantea "canalizar la inversión rápidamente hacia donde sea más necesaria".

Desde la Conselleria han subrayado la especial gravedad de los efectos económicos que ha provocado la pandemia en las islas, en términos de caída del PIB, descenso de la actividad e incremento del paro, criterios por los que entienden que Baleares debe ser una de las regiones que reciba más apoyo.

Esta semana, el pleno del Parlamento Europeo aprobaba el programa React-EU, el segundo pilar del fondo de recuperación que destinará entre 2021 y 2022 un total de 47.500 millones de euros a las regiones de la UE para contrarrestar las consecuencias de la crisis del coronavirus.

Desde la Conselleria han indicado que hasta 10.000 millones de euros se pondrán en manos de las Comunidades españolas, de los que 8.000 millones ya podrían disponerse a partir del año que viene, de acuerdo con el plan presupuestario para 2021 del Gobierno estatal.

Para las próximas semanas se prevé celebrar una Conferencia Sectorial de Fondos Europeos -todavía no convocada-, en la que se espera abordar tanto el reparto de fondos como las prioridades de inversión.

Podrán optar a financiación todas los proyectos iniciados a partir del 1 de febrero de este año y los recursos podrán gastarse hasta el final de 2023.

El Govern se ha preparado para poder asignar los nuevos fondos a los programas FEDER y FSE, identificando durante los últimos meses posibles proyectos rápidamente ejecutables para afrontar las necesidades del COVID-19.

Desde la Conselleria han avanzado que la mejora de infraestructuras educativas, sanitarias y sociales, políticas activas de empleo, movilidad sostenible y soluciones digitales serán algunas de las prioridades de intervención para el Ejecutivo, algo que ya se ha trasladado a las autoridades nacionales y comunitarias.

Los eurodiputados dieron luz verde a la herramienta con 654 votos a favor, 23 en contra y 17 abstenciones. Es el segundo programa más cuantioso del fondo europeo de recuperación (bautizado como Next Generation EU), tras el Instrumento de Recuperación y Resiliencia (RRF), que repartirá 672.500 millones entre transferencias y préstamos.

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