Fue una solución de emergencia y provisional hace 20 años. Pero al dilatarse tanto su existencia, Los Asperones se ha convertido en un gueto de la infravivienda. La Junta dice ahora que unas 50 familias de las 264 que viven en la zona desean marcharse de allí y están preparadas para ello.

"Tenemos estos datos desde hace tiempo y ahora estamos verificando que ésa es la voluntad de estas personas y si su situación económica, laboral y sociocultural ha mejorado o no. Les estamos preguntando si quieren salir definitivamente o si prefieren otra solución", ha explicado este jueves la delegada provincial de Vivienda, Josefa López.

La Junta trabaja en un plan de erradicación del núcleo chabolista que ha empezado este año (aunque se anunció en 2007) y culminará en 2014. "Estamos buscando casas dentro del patrimonio de vivienda que tiene la Junta en otras barriadas de Málaga u otros municipios. Serían alquileres que se podrían beneficiar de las ayudas autonómicas sin superar el 25% de los ingresos familiares".

Otra parte de los vecinos se realojará en edificios de nueva construcción (el Ayuntamiento pretende reurbanizar la zona) donde también habrá arrendamientos. Para la adquisición de inmuebles y la mejora de la zona se ha presupuestado gastar 14 millones en cinco años, sin contar planes de formación y empleo.