La Audiencia de Lleida ha condenado a 25 años de prisión al jubilado que mató a hachazos en enero de 2008 a un tetrapléjico con quien compartía habitación en una clínica de esta ciudad.

El juez le condena a 20 años por este asesinato y a cinco más por la agresión que causó con unas tijeras a una mujer también ingresada el mismo centro. El encausado, José S.S. tendrá que indemnizar con 30.000 euros a los familiares del fallecido.

La sentencia considera probada la agresión a la joven, pero no ve responsabilidad subsidiaria alguna de la Clínica o de su aseguradora, como reclamaba la familia de la mujer, también parapléjica a la que José S.S hirió con unas tijeras.

No se arrepiente

En el juicio, el anciano, que necesita un caminador para andar, reconoció el asesinato de su compañero, del que dijo que no se arrepentía, pero no reconoció la agresión a la joven. "No me arrepiento. En lugar de un hacha tenía que haber comprado una pistola y hablaríamos de otra cosa. Habría matado a Barceló, a la directora, al psicólogo y a la coordinadora, a los cuatro", afirmó el procesado, refiriéndose al médico del centro, a la directora y a otros dos sanitarios al ser preguntado por el asesinato.

El crimen ocurrió a la una de la madrugada del 15 de enero en la clínica Jaume Nadal Meroles. Al día siguiente de los hechos, José S.S. explicó a los Mossos d'Esquadra que no tenía nada contra su compañero, que sólo quería llamar la atención del centro, del que iba a ser trasladado a otro de Balaguer.

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