La Fiscalía de Países Bajos ha confirmado que un informático neerlandés de 44 años accedió a la cuenta de Twitter del presidente Donald Trump, tras descubrir que su contraseña era "maga2020", así como ha anunciado que no presentará cargos en su contra al tratarse este de un "hacker ético" que avisó de lo sucedido a las autoridades estadounidenses.

El internauta pirata, Victor Gevers, hizo público a finales de octubre que había accedido a la cuenta personal de Twitter de Trump en tan solo siete intentos con diferentes versiones de contraseña. La correcta, curiosamente se trataba de la abreviatura en minúscula del eslogan de su campaña, Make America Great Again: "maga2020".

Para más inri, Trump tenía el sistema de doble verificación desactivado, por lo que, al tratar de acceder, Gevers no necesitó enviar un mensaje al teléfono móvil o al correo del mandatario para autorizar el acceso a la cuenta. Un hecho que los fiscales confirmaron tras la investigación de la unidad cibernética de la policía nacional, a pesar de que tanto Twitter como la Casa Blanca nieguen que esto haya ocurrido.

Ahora bien, el "hacker" no aprovechó la situación para tuitear en nombre de Trump, leer sus mensajes privados, cambiar la clave o la foto de perfil, opciones posibles cuando se accede a una cuenta de Twitter. Tan solo alertó a la Casa Blanca en varios intentos fallidos que, días más tarde, acabaron en agradecimiento, un cambio de clave por parte e Trump y la activación de la doble verificación de la cuenta.

Aunque la piratería informática es punible en Países Bajos, la Fiscalía consideró que Gevers había cumplido criterios para no ser imputado, ya que se trata de un "hacker" ético, dedicado a la "divulgación responsable", y se puso en contacto con las autoridades bajo su nombre real, les avisó de la situación y les dio consejos sobre cómo arreglar la vulnerabilidad de la cuenta de Trump.

Eso sí, no es la primera vez que Gevers logra acceder a la cuenta del presidente estadounidense, pues ya en octubre de 2016, él y varios amigos dieron con la contraseña de Trump en una base de datos filtrada por piratas informáticos. Entonces, Trump tenía "youarefired" ("estásdespedido", en inglés) como clave de acceso.

Entre otros descubrimientos, el pirata informático dio con una base de datos china con información personal (teléfono, fechas de nacimiento, empleador, número de identidad o nacionalidad) y ubicaciones (con coordenadas GPS de lugares visitados) de 2,7 millones de habitantes de Xinjang, la provincia más grande de China y hogar de uigures, evidenciando que el Gobierno chino está monitoreando a esta minoría étnica en el país.