La presidenta de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), Rosa Alarcón, ha reclamado este miércoles un fondo de rescate Covid a las administraciones catalana y española para 2021 ante el descenso de pasajeros y la correspondiente caída de ingresos.
“Es evidente que entre el 31 de diciembre y el 1 de enero de 2021, la situación no cambiará”, ha afirmado Alarcón en una encuentro con los medios de comunicación para hacer balance de este año. TMB ha tenido que asumir 179,3 millones de euros de gastos derivados de la Covid-19 a pesar de conseguir ahorrar unos 80 millones de euros. Según estima la empresa, a finales del año que viene, la cifra de usuarios se situará cerca del 80% respecto al total de 2019.
El objetivo de la compañía es que este déficit pueda ser sufragado por “fuentes externas” y que no vaya a cargo de la Autoritat del Transport Metropolità, según ha comentado el consejero delegado de TMB, Gerardo Lertxundi, que ha definido este año que se acaba como “difícil y complicado”.
La compañía comenzó el año con un presupuesto de 598,6 millones de euros y ha ahorrado 23,8 millones de euros optimizando costes y 58,4 millones de euros aplazando inversiones previstas.
De cara a 2021, TMB sitúa un promedio de viajeros equivalente al 80% de los usuarios de 2019. Es por eso que los dirigentes de la compañía asumen que será un año de “transición” con una demanda que irá creciendo a la espera de que se vaya suministrando la vacuna a la población y se recupere la movilidad.
En diciembre, ya prevé alcanzar un 90% de los viajeros habituales y recuperar la normalidad en 2022. La presidenta de TMB ha avisado de que estas previsiones irán siempre en función de la evolución epidemiológica y de la vacunación a la población.
La recaudación fue un 93,2% menos en abril
La recaudación de TMB comenzó a caer en picado también a partir de marzo, con un 57,7% menos y se hundió en abril hasta el 93,2%, coincidiendo con el confinamiento más estricto y el uso del transporte público solo por parte de trabajadores esenciales. En los meses de verano, la caída se moderó, con descensos del 60% aproximadamente hasta cerrar en noviembre con un 56,1% menos (15 millones de euros).
Ante este agujero económico causado por la pandemia, Alarcón ha evitado pronunciarse sobre un eventual aumento de tarifas de los títulos de transporte público al tratarse de una decisión que corresponde a la ATM.
No obstante, este miércoles, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ya ha pedido que se congelen los precios de cara al año que viene en una carta dirigida al vicepresident del Govern en funciones de president, Pere Aragonès, y al conseller de Territori i Sostenibilitat, Damià Calvet.
Alarcón ha evitado pronunciarse sobre un eventual aumento de tarifas de los títulos de transporte público
Tanto Alarcón como Lertxundi han subrayado que a la caída de la cifra de viajeros hay que añadir el hecho de que los usuarios que continúan desplazándose lo hacen con tarifas sociales, es decir, títulos multiviaje que favorecen a los usuarios recurrentes, y en cambio, han caído los viajeros ocasionales visitantes en la ciudad y turistas sobre todo, que aportaban una parte importante de la recaudación.
Hasta justo antes de la pandemia, TMB ha registrado el mejor febrero de la serie histórica, con 53,3 millones de validaciones, cifra que representaba un aumento del 5,18% respecto al mismo mes de 2019. Con la llegada de la crisis sanitaria, no obstante, este ritmo de crecimiento se vio interrumpido con un descenso del 53,4% de validaciones (26,1 millones), que se acentuó durante los meses de abril y mayo, con caídas del 91,4% y el 82,7%, respectivamente.
Previsto cerrar diciembre con un 55% de la demanda
A partir de entonces, la cifra de validaciones se fue recuperando, hasta cerrar noviembre con un 48,7% menos (28 millones de validaciones) y con unas previsiones de que en diciembre se cierre con el 55% de la demanda.
En términos acumulados, desde enero hasta noviembre, se han registrado 302 millones de viajes, un 47% menos que en el periodo acumulado del año pasado.
En términos acumulados, desde enero hasta noviembre, se han registrado 302 millones de viajes, un 47% menos que en el periodo acumulado del año pasado
Los dirigentes de la compañía han reivindicado que durante los meses de pandemia se está ofreciendo “la mayor oferta de la historia”, a diferencia de operadores de otras ciudades, y ha dicho que solo se ajustó la oferta y la demanda en las semanas de confinamiento más estricto. En general, según Lertxundi, la movilidad en el transporte público de Barcelona se ha recuperado mejor que en otras ciudades españolas y europeas.
Alarcón ha atribuido el descenso de la cifra de viajeros por "múltiples factores", desde la caída del turismo, hasta los afectados por ERTE o ERE o el miedo de algunos ciudadanos a coger el transporte público.
Alarcón y Lertxundi han situado la ambientalización de la flota como uno de los objetivos de cara í los próximos años y han señalado que Barcelona será “pionera” con la entrada en funcionamiento de los buses propulsados por hidrógeno y que ya se están fabricando, ha comentado la presidenta. A pesar de ello, entre 2021 y 2024, las previsiones de compras de nuevos buses ya serán todos de energía limpia.
Según la presidenta de TMB, el eje vertebrador de la movilidad del futuro pasa por el transporte público y ha puesto de ejemplo el Plan de Movilidad Urbana aprobado recientemente, que prevé seis millones de desplazamientos diarios en 2024 frente a los 5 millones de febrero de 2020.
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