Una concentración para frenar un desahucio en Barcelona ha terminado con cargas policiales de los Mossos d'Esquadra, tres personas detenidas acusadas de atentado contra la autoridad y tres agentes heridos. 

Concretamente, el desahucio ha sido en el número 597 de la calle Còrsega, en la zona de la Sagrada Familia. Los activistas que intentaban frenar el desalojo aseguran que la familia afectada -una mujer, su marido y un nieto- no tenían notificación previa y que por la mañana se han topado con la comitiva judicial para echarlos, según declaraciones a Betevé. Habría sido entonces cuando el sindicato se ha enterado y varias personas se han concentrado ante el edificio para evitar que se ejecutara. 

Por otro lado, la versión policial asegura que agentes de Seguridad Ciudadana han acompañado la comitiva judicial para ejecutar el desalojo sin que hubiera ninguna convocatoria de concentración. Mientras la persona desahuciada recogía sus cosas han llegado los activistas, que han intentado forzar la puerta de la portería y han roto los vidrios. Entonces han salido los agentes y les han golpeado con las porras. Los Mossos han activado los antidisturbios y tres de los agentes han resultado heridos. 

Según la policía, uno de los detenidos había huido corriendo en el momento de identificarlo. Los agentes lo han perseguido y atrapado, y lo han llevado a la zona de seguridad. Allí habría agredido uno de los tres agentes heridos, que ha causado baja. El desahucio se ha acabado practicando, en plena segunda ola de la pandemia de la Covid-19.