Natalie Portman cree que haber sido "sexualizada" cuando tenía 13 años le privó de su "propia sexualidad"

La oscarizada estrella aprendió hebreo e inglés cuando era pequeña, pero también puede mantener conversaciones en francés, japonés, alemán y español. Además, es superdotada.
La actriz Natalie Portman.
GTRES
La oscarizada estrella aprendió hebreo e inglés cuando era pequeña, pero también puede mantener conversaciones en francés, japonés, alemán y español. Además, es superdotada.

Haber empezado tan pronto en una sociedad que no tiene problemas en dotar a las menores de ciertos rasgos de índole sexual puede afectar negativamente a su educación posterior en este ámbito. La prueba es Natalie Portman, que muchos años después ha decidido hablar abiertamente sobre ello.

A sus 39 años, la intérprete ganadora del Oscar a mejor actriz por su papel en Cisne negro ha querido tratar tan controvertido tema en en el podcast Armchair Expert with Dax Shepard. Para ello hay que recordar cuál fue el primer papel de Portman en el cine: la joven protagonista de El profesional (Léon), dirigida por Luc Besson y que se rodó en 1994, cuando la actriz contaba con 13 años de edad.

En esa película interpretaba a una huérfana que acababa enamorándose y declarándose al sicario interpretado por Jean Reno. Justo después de esa cinta, y tras una breve aparición en Heat, la también directora y productora israelí (su verdadero nombre es Neta-Lee Hershlag) se acabó de encumbrar con Beautiful Girls, de Ted Demme, donde nuevamente, y siendo aún menor, se enamoraba de un hombre adulto.

"Haber sido sexualizada cuando era niña me quitó mi propia sexualidad, porque me dio miedo", ha explicado Portman en el programa de radio (aunque le sigue teniendo un enorme cariño a su primera película, como ha demostrado en su Instagram), puntualizando que intentó aún así ganarse el respeto de la industria cerrándose a cualquier propuesta de corte más íntimo.

El mayor ejemplo de ello fue su rechazo a ser la protagonista de otro largometraje de corte similar: Lolita, una adaptación de la celebérrima novela de Vladimir Nabokov, en el que un hombre de mediana edad se enamora desmesuradamente de una niña de 12 años. La película, dirigida por el británico Adrian Lyne, acabaría estrenándose en 1997 protagonizada por Jeremy Irons en el papel de Humbert Humbert y Dominique Swain como la Lolita del título.

Fue así, explica la intérprete de V de Vendetta, Jackie o Closer, como consiguió aunar "fortalezas" para protegerse de esa atención mediática no buscada. Eso sí, en su crecimiento, que se daba mientras trabajaba en una película de Woody Allen (Todos dice I love you) o en una saga como Star Wars, Portman notó cómo no pudo desarrollar como otras chicas su propia sexualidad.

"Mientras que a esa edad yo ya tenía mi propia sexualidad y mi propio deseo -así como quería explorar ciertas cosas y ser más abierta-, a la vez no me podía sentir segura de ningún modo porque había hombres mayores interesados [sexualmente] en mí", ha rememorado.

Debido a ese cerrarse en banda y alejarse un poco de la industria para centrarse en sus estudios de Psicología en la Universidad de Harvard, Hollywood entendió que se trataba de una de esas actrices "conservadoras": "Muchísimas personas tenían esa impresión de mí, que era muy seria y tradicional, y me fui dando cuenta de que yo misma estaba cultivando esa imagen conscientemente para sentirme más segura. Si alguien te respeta, no te hará sentir como un objeto".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento