Si bien aún no se ha determinado el número de empleados afectados, se ha propuesto afecte a un número máximo de 110 empleados de los 857 que la empresa tiene en plantilla en la actualidad, según ha explicado la ingeniería en un comunicado recogido por Europa Press.

Igualmente se está tramitando un Expediente de Regulación Temporal de empleo (ERTE) que contiene medidas de suspensión temporal de determinados contratos de trabajo para esos mismos centros para aquellos períodos en los que la carga de trabajo no sea suficiente para dar plena ocupación efectiva a la plantilla durante el año 2021.

Según explican desde la compañía, las perspectivas que actualmente se tienen para el año 2021, y la coyuntura actual, le obligan a abordar una serie de medidas de carácter colectivo como las indicadas, con los objetivos "de reorganizar y racionalizar la organización y estructura actual, optimizar los recursos en la Empresa y adecuar el volumen de la estructura de la plantilla de la Empresa a la carga efectiva de trabajo que se prevé en 2021 y años sucesivos".

Así mismo, la empresa está trabajando con una consultora externa en la confección de un plan de recolocación externa para aquellos trabajadores que se vean afectados por las extinciones.

El contenido y alcance definitivo se concretará a lo largo del periodo de consultas. Todo ello con el fin de asesorar a las personas afectadas por el despido colectivo para su posible recolocación y búsqueda activa de empleo, señalan desde Imasa.