Casi dos años después de que se inaugurara y a punto de cumplirse el quinto aniversario de los atentados del 11-M, el Monumento a las víctimas, situado en la estación de Atocha, apareció este jueves por la tarde con un agujero y deshinchado, tal y como comprobó 20 minutos.

La lámina de EFTE (una variante del teflón) que recubre la estructura del vidrio de la escultura y en la que están impresos los mensajes dejados por los ciudadanos en recuerdo de los fallecidos, se arrugaba y presentaba un boquete en su cúpula. El Ayuntamiento de Madrid aseguró que su mantenimiento es responsabilidad de Renfe. Este periódico intentó ayer sin éxito ponerse en contacto con la compañía ferroviaria.

Ésta es la segunda vez que el monumento se avería. El  1 de noviembre de 2007, apareció deshinchado por un fallo en el sistema de despresurización de las puertas de acceso a la sala que interrumpe el efecto de vacío que mantienen unida la lámina de vidrio.