Fundación La Caixa y Avomacyl subrayan el papel del voluntariado durante la pandemia

En vísperas del Día Internacional de los Voluntarios, y en el marco del proyecto de voluntariado de la Fundación La Caixa para personas mayores, la Asociación de Voluntarios de Mayores de Castilla y León (Avomacyl) han subrayado el papel de las acciones de voluntariado para dar apoyo durante la pandemia de la COVID-19.
Voluntarios mayores de Fundación la Caixa
Voluntarios mayores de Fundación la Caixa
FUNDACIÓN LA CAIXA
Voluntarios mayores de Fundación la Caixa

Como han destacado a través de un comunicado remitido a Europa Press, los voluntarios habituales que colaboran con Avomacyl "se han reinventado" para dar respuesta a las necesidades del momento y crearon un blog en el que comparten reflexiones, poemas, vídeos, información práctica y curiosidades sobre monumentos históricos de Castilla y León, a modo de conexión virtual y trabajo en red durante los momentos difíciles.

La Fundación La Caixa, en colaboración con la Gerencia de Servicios Sociales de Castilla y León y el Ayuntamiento de Valladolid, ha reconocido el valor de las personas mayores voluntarias, como "agentes de cambio" y ha agradecido "su compromiso con el bien común para la transformación de la sociedad".

El proyecto de voluntariado se enmarca en la iniciativa de Acciones Locales de la Fundación La Caixa, que se puso en marcha en 2011, se realiza en Castilla y León con la colaboración de la Gerencia de Servicios Sociales de Castilla y León, el Ayuntamiento de Valladolid y Avomacyl.

En toda España, el proyecto de Acciones Locales ha implicado ya a más de 6.300 voluntarios y ha tenido, hasta ahora, cerca de 25.000 personas usuarias. Pese a verse afectado por la coyuntura actual, este año se han realizado 86 acciones locales con 264 personas beneficiarias.

El programa de Personas Mayores de la Fundación La Caixa realizó en 2018, en colaboración con la Fundación Pilares, el estudio Personas Mayores y Voluntariado, en el que analizaron los beneficios de estas actividades en las personas mayores y en los usuarios, quienes destacan que es enriquecedor a nivel personal pero también resulta socialmente útil.

Sentirse valorado es el beneficio principal para los mayores (39,5 puntos), seguido del fomento de las relaciones y habilidades sociales (30 puntos), dar salida a su vocación solidaria (21 puntos), el aumento de la autoestima, la seguridad y la confianza (18,4 puntos) y mantenerse activos (14,4 puntos).

Además, realizar voluntariado en la comunidad refuerza, para la mayoría de personas mayores, su interés en lo que ocurre en la comunidad.

Por otro lado, para los usuarios el bien principal es la autorrealización y adquisición de conocimientos (26,7 puntos), además del fomento de las relaciones y habilidades sociales (24,1 puntos) y la mejora de su calidad de vida (15,9 puntos).

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