La segunda ola de la pandemia se está ensañando como nunca antes con el corazón del Viejo Continente. El número de fallecidos registrados en este segundo periodo de auge de contagios ya supera claramente al anterior en Hungría, Croacia, Bulgaria, Polonia, Rumanía o Portugal y amenaza con hacerlo en Alemania o Italia, dos países que han registrado sus máximos diarios de mortalidad en toda la pandemia durante esta oleada. 

España baja de la incidencia media de 250 contagios y abandona el "riesgo extremo" por coronavirus

Aunque la curva de incidencia ya enfila la cuesta abajo en la mayoría de países europeos (con sonadas excepciones como la de Suecia o Croacia), el retraso que se produce entre la detección y el fallecimiento provocará que la mortalidad se mantenga muy alta durante varias semanas más. 

Europa se acerca peligrosamente a las fiestas navideñas con niveles muy altos de incidencia, presión hospitalaria y muertes por Covid, un periodo que tiene todos los ingredientes para disparar de nuevo la epidemia: reuniones sociales entre no convivientes, espacios cerrados, fiestas y desplazamientos territoriales.

Algunos países se han anticipado y han anunciado severas restricciones para Navidad, como es el caso de Italia, mientras que otros como Alemania o España abrirán la mano en las restricciones los días festivos más señalados.

Italia: Sin Navidad tras una tragedia mayor que la de abril

La nación transalpina sufrió el jueves su día más negro de mortalidad en toda la pandemia, con 993 fallecidos en una sola jornada. El país superó el pico en la segunda mitad de noviembre, pero su incidencia aún ronda los 600 casos por 100.000 habitantes, de las más altas de Europa.

Para frenar los contagios, el Gobierno italiano ha establecido férreas restricciones con vistas al periodo navideño. Los desplazamientos entre regiones están prohibidos y el 25, 26 y 1 de enero tampoco estarán permitidos entre municipios. Además, durante todo ese tiempo regirá un toque de queda entre las 22 y las 5 horas, que se extenderá hasta las 7 en Nochevieja. 

"Será una Navidad diferente, pero no menos auténtica", expresó el jueves el primer ministro, Giuseppe Conte. "Todavía queda un largo camino por recorrer, tenemos que evitar la tercera ola", añadió.

Francia: Navidad confinada si los casos no bajan de 5.000 al día

En el vecino del norte, la celebración de la Navidad pende de un hilo. El país se encuentra confinado desde el pasado 30 de octubre y un alivio en las restricciones que entró en vigor el sábado pasado ha permitido la reapertura de comercios y servicios a domicilio, así como librerías o bibliotecas hasta las 21 horas. 

Sin embargo, salvo que los casos bajen de 5.000 diarios para el próximo 15 de diciembre, los franceses pasarán las fiestas confinados. De mejorar la situación, el Gobierno tiene previsto reabrir cines, teatros y museos, pero también implantar un toque de queda entre las 21 y las 7 horas, eso sí, con excepciones el 24 y el 31 de diciembre, aunque no ha concretado cuáles. 

"Es imperativo que limiten el número de personas en la mesa y que eviten las reuniones demasiado numerosas", pidió el primer ministro, Jean Castex, a sus compatriotas el pasado 26 de noviembre. 

Francia ha informado de un promedio de 10.648,3 casos diarios en los últimos siete días, con un promedio de 456,85 fallecidos cada jornada en ese mismo periodo, según datos del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC por sus siglas en inglés).

Alemania: "Es un éxito parcial y no es ni de lejos suficiente"

Alemania lleva en una meseta de incidencia desde primeros de noviembre y se ha estabilizado en torno a los 300 casos por cada 100.000 habitantes, pero en las últimas dos semanas ha registrado más de 300 fallecidos cada día, unas cifras superiores a las registradas durante la primera ola.

"Es un éxito parcial y no podemos convencernos bajo ninguna circunstancia de que esto es suficiente", valoró la canciller, Angela Merkel sobre la estabilización lograda en los contagios. 

Para afrontar la Navidad, Alemania ha decidido abrir la mano en las restricciones y entre el 23 de diciembre y el 1 de enero permitirá reuniones de hasta de 10 personas "de familia inmediata o amigos cercanos". Para hacerlo con seguridad se recomienda reducir los contactos "a un mínimo absoluto" entre cinco y siete días antes del encuentro.